La multinacional Siemens es uno de los socios alemanes que tienen mucho interés en invertir junto a otras empresas alemanas unos 500 millones de euros en el complejo turístico Costa Afortunada, que promueve la familia Del Castillo en unos terrenos de Tarajalillo. La cabeza visible del grupo de inversores germanos es la consultoría WLH Anlage-und Organisations Beratung GMBH, sociedad que se dedica a asesorar a sus socios sobre los proyectos de inversión que les pueden interesar, al tiempo que también les aconsejan sobre los depósitos en bonos y en la Bolsa de Valores.

Aunque Siemens está vinculada con la construcción de maquinaria, electrodomésticos y reactores nucleares, también tiene divisiones dedicada a las tecnologías del agua y de la construcción. En este último sector la multinacional ofrece soluciones innovadoras y sostenibles en las áreas de movilidad, tecnología para edificios y seguridad, eficiencia energética condiciones que la familia Del Castillo ha planteado que deben cumplir la urbanización Costa Afortunada.

Según señalaron ayer los promotores, los inversores alemanes se interesaron desde un primer momento en construir en la zona alta del Aeroclub, en Tarajalillo, un parque de atracciones como el Europa Park situado en Rust, al sur de Alemania, cerca de la frontera con Francia y Suiza. Además, el grupo teutón que aglutina la consultoría WLH quiere vincular a esta oferta de ocio dos hoteles de cinco estrellas, que sumarían unas dos mil camas. Entre el parque y los hoteles de estos empresarios estiman crear unos 5.000 empleos.

Hoteles

Es una vez que los alemanes se enteran de que la urbanización de los 2.389.650 metros cuadrados de Tarajalillo forma parte de un Plan Parcial denominado PTP9 por el Cabildo de Gran Canaria, que había que acometer de forma conjunta, cuando buscan más socios que inyectaran dinero al proyecto de la familia Del Castillo. Es así como la sociedad WLH con sede en Ettlingen (Baden Baden) se pone en contacto con un importante grupo constructor de San Petersburgo para proponerle que participe en el ambicioso proyecto turístico Costa Afortunada. Los empresarios rusos pretenden construir un campo de golf, que sería el más grande de la Isla, cuatro hoteles de cinco estrellas y villas de lujo además de dos centros comerciales. Los arquitectos alemanes y rusos ya trabajan de forma coordinada.