Moderno, innovador, muy luminoso, amplio, precioso. Los residentes de San Bartolomé de Tirajana y Mogán coincidían en definir con estos atributos el centro comercial de El Tablero de Maspalomas, que ayer inició su andadura. Pero, lo que más resaltaron todos los consumidores fue el hecho de que por fin, cuentan con un establecimiento en el Sur con todas las tiendas de moda porque hasta ahora no tenían más remedio que acudir a Vecindario o a la capital grancanaria. Hasta muchos turistas dejaron ayer la playa, pese a que lucía un sol estupendo, para adentrarse en los comercios de este nuevo espacio comercial y de ocio, y realizar algunas compras. El centro que ha promovido el grupo Número 1 cuenta además de las tiendas de moda, entre las que destaca Zara, que se estrena en San Bartolomé de Tirajana, dispone de una gran superficie de alimentación de la cadena Hiperdino.

"Aquí en el Sur echábamos de menos un centro comercial moderno como este, porque los de Playa del Inglés están muy desfasados, y teníamos que ir a Vecindario o a Las Palmas para comprar". Teresa Socorro Jiménez fue una de tantas vecinas del Sur que se apresuró por visitar en la mañana de ayer este establecimiento. Esta residente de Arguineguín, que saca tiempo de sus tareas de ama casa para estudiar Educación Secundaria Obligatoria, comentó, además, que le habían gustado las instalaciones "por la amplitud y porque tiene mucha luz natural". También su amiga, Cristina Martín Castellano, que vive en el mismo núcleo marinero de Arguineguín, coincidió en destacar como uno de los aciertos del inmueble, que su diseño haya tenido en cuenta el clima del Sur, ya que "ha aprovechado que casi siempre hace sol para crear la sensación de que estás comprando en una calle de tiendas y no en un centro cerrado". Tras insistir en el carácter innovador del establecimiento, se aventuró a asegurar que en adelante ya no tendrá que salir tanto de Mogán para renovar su vestuario.

Casualmente, Jonay Martín Tacoronte, también fue otro de los habitantes de Arguineguín, que aprovechó el tiempo libre para ir de compras a El Tablero. Este camarero en activo ya cargaba con algunas bolsas de las franquicias de textil como Zara o Pull & Bear, a eso de las doce del mediodía. "Me ha gustado mucho, y hacía falta una oferta de este tipo en el Sur" declaró. La luminosidad, las vistas que ofrece las terrazas de las Dunas de Maspalomas, y el espacio para disfrutar de un día con los niños fueron otras de las características que pus o en valor este cliente. "Precioso". Así, definió Alcira Santana Pacheco, jubilada y residente en El Tablero el nuevo centro comercial que estaba acompañada de su hermana Mari Cielo. A esta residente de San Bartolomé de Tirajana, las tiendas le quedan cerca de casa, y por ello, ya daba por hecho que "a partir de ahora, por las tardes no se iba a quedar en casa viendo la tele, porque engorda". Además, comentaba que muchas veces, como no dispone de vehículo, se le hacía "pesado ir en guagua hasta Vecindario o Las Palmas para ir de compras".

Para Cristóbal Quintana Viera, que vive en Montaña La Data, bastó con dos palabras: "guay guay", para resumir la sensación que le causó el espacio comercial. Con una lata de aceite de oliva en mano, que delataba su paso por el Hiperdino, manifestó que este negocio es "una válvula de oxígeno" para El Tablero, si bien su mujer, lamentó que falten los cines.

Este entusiasmo se registró en las cajas. En Hiperdino se agotaron los cien primeros lotes de regalo, por compras superiores a 20 euros en la primera hora y media. La cadena contaba con superar las 2.500 compras a lo largo de la jornada. A su vez, el gerente de El Tablero, Fernando Martínez, confiaba en que se alcanzaran entre las 8.000 y las 10.000 visitas, aunque dejó claro que los días fuertes serán el sábado y el domingo.