La determinación del Cabildo de Gran Canaria de incoar un procedimiento para pedir al Gobierno canario que declare Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de sitio histórico el entorno del Oasis fue valorada ayer por algunos empresarios como un varapalo a la rehabilitación turística del Sur. El hecho de que esta protección conlleve la suspensión de todas las licencias urbanísticas de este entorno, más allá de la que ya tenía en la mano la cadena Riu para derribar el hotel Oasis, supone a juicio de representantes patronales y líderes de grupos como Satocan un nuevo freno a las inversiones que se pretenden hacer en este área de Maspalomas.

"Con o sin razón en esta Isla siempre pasa que cuando llegan las inversiones aparece alguien que las paraliza" sentenció ayer Juan Miguel Sanjuán, presidente del grupo Satocan. Este empresario añadió que a su juicio el planteamiento del Cabildo supone "desgraciadamente otro parón en la renovación turística del Sur". Precisamente, el proyecto de este grupo, que pretendía construir un centro comercial en el aparcamiento del Faro, incluida en el Plan de Modernización, es uno de tantas intervenciones que se queda en el aire ahora. A raíz de esto, Juan Miguel Sanjuán apostilló que no sabe qué le ocurre a Gran Canaria, pero siempre se le truncan las inversiones.

También el vicepresidente de la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo, Tom Smulders, expresó el malestar que ha causado al sector alojativo este impasse que ha provocado el Cabildo al suspender las licencias urbanísticas en toda la zona del Oasis de Maspalomas. Smulders comentó que la corporación insular debe saber que la decisión se sustenta en unos "meditados" fundamentos jurídicos puesto "las consecuencias son perjudiciales para la inversión y la dinamización turística de todo el frente del Oasis".

El representante del sector turístico denunció que el acuerdo del Cabildo crea "tal inseguridad jurídica a los inversores" que a partir de ahora "los que no tienen raíces en la Isla se lo van a pensar mucho para traer su dinero". Y añadió que "invertir en el Sur tiene un riesgo añadido puesto que en cualquier momento una administración se vale de cualquier argumento para contentar a alguien aunque sea con carácter retroactivo".

Inseguridad jurídica en el exterior. El vicepresidente de la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo, Tom Smulders, señaló que la paralización de la rehabilitación del hotel Oasis, en la imagen, genera recelos en los inversores extranjeros por lo que genera de inseguridad jurídica para cualquier iniciativa de inversión.