Durante la Romería-Ofrenda de este sábado, en el marco de las Fiestas del Pino de Teror, cada carreta fue presentada ante el público por una pareja de niños que recitaron unas décimas alegóricas a su lugar de procedencia. Ofrecemos aquí esos poemas completos compuestos por el verseador grancanario Yeray Rodríguez.

GRAN CANARIA

NIÑO:

Hoy, Madre, debes estar

repleta de regocijos

viendo que llegan tus hijos

a tu Teror y a tu altar.

Cada quien con su pesar

o su dicha hoy comparece

y cada esfuerzo merece

que aquel que te venga a ver

pueda con salud volver

a verte en el dos mil trece.

NIÑA:

Porque hoy no habrá más destinos

que este templo y esta plaza

y abrirás feliz tu casa

a todos los peregrinos;

porque hoy todos los caminos

llevarán hasta tu amor

y la isla que al fervor

de tu fe sigue prendida

querrá pasarse la vida

caminito de Teror.

AGAETE

NIÑA:

Venimos desde Agaete:

pueblo de orilla y de valle

pueblo de camino y calle,

carnaval y tenderete.

Pueblo que en fiesta se mete

cuando el mes de agosto alcanza

y que a las calles se lanza

el día en el que el pinar

baja bailando hasta el mar

a llenarlo de esperanza.

NIÑO:

Te queremos ofrendar

lo que nuestro pueblo encierra:

los frutos que da la tierra

y la bendición del mar;

la fe de quien va a pescar,

la de quien siembra café,

la fe de aquel pueblo que

vive entre salitre y monte

asomado a un horizonte

sobre el que sus sueños ve.

AGÜIMES

NIÑO:

Somos de Agüimes y por

ser del pueblo lagartero

siempre hay un carnavalero

despierto en nuestro interior.

Quizá por este fervor

juntamos penas y risas

sabiendo que si las prisas

desorientan nuestras huellas

nos orientan las estrellas

que se ven desde Temisas.

NIÑA:

Traemos, Virgen del Pino,

lo que hay sobre la carreta

y la ofrenda se completa

con los sueños del camino.

Aquí está Agüimes, que vino

a tu cita de Teror:

pero es tan grande el amor

con el que siempre te halaga

que también en Arinaga

se hace una fiesta en tu honor.

ARTENARA

NIÑO:

Artenara viene a ver

a nuestra Virgen del Pino,

viene bajando un camino

que hay que subir al volver.

Viene a Teror a traer

sus paredes, sus bocados,

sus barrancos afilados

y a su gente, que se aferra

a la entraña de la tierra

como sus antepasados.

NIÑA:

Viene con la devoción

de una Virgen y una cueva

que el que es de Artenara lleva

dentro de su corazón;

con un timple hecho canción

cuyo eco no se acaba;

con la mano que lograba

convertir el barro en hondo

y con el telón de fondo

del Pinar de Tamadaba.

ARUCAS

NIÑA:

Aquí está Arucas, Patrona,

la que con tu pueblo linda,

la que esta tarde te brinda

las bellezas que pregona;

la montaña que amontona

paisajes desde su altura;

la caña cuya dulzura

en las barricas se adentra

y el labrante que le encuentra

a las piedras la hermosura.

NIÑO:

Nuestras fiestas sanjuaneras

del solsticio veraniego,

donde conversan el fuego

y el humo de las hogueras;

nuestro mar de plataneras

que nuestra esperanza es

y el mar que moja los pies

de Arucas, el viejo mar

que se sienta a conversar

con San Pedro y San Andrés.

FIRGAS

NIÑA:

Firgas acerca a Teror

todos los años el sueño

de un municipio pequeño

que sabe hacerse mayor;

el generoso verdor

de montañas y laderas,

de canteros y berreras

y el agua que los socorre,

que por sus acequias corre

y baila en sus cantoneras.

NIÑO:

Venimos desde La Villa

de las fuentes legendarias,

del Paseo de Canarias,

de Rosales, de Padilla,

de Buenlugar, Quintanilla,

La Caldera€, del feliz

pueblo que honra a San Luis

y al patrono de los perros,

el de los mejores berros

y las vacas del país.

GÁLDAR

NIÑO:

Gáldar parte de una esquina

de Gran Canaria y asciende

y ella misma se sorprende

de ser cumbrera y marina.

De los Pinos a Sardina

late una tierra sagrada

cuya memoria enraizada

ha ido dictando sus pasos

desde los míticos trazos

que hay en su Cueva Pintada.

NIÑA:

Nuestra ofrenda es la carreta

pero también la memoria,

cada huella de la historia

que nuestra imagen completa.

Nuestra ofrenda es la paleta

de colores, magia y brillo,

de San Isidro, El Saucillo,

Sardina, Rojas, Barrial,

Caideros, El Agazal

Barranco Hondo o Juncalillo

GUÍA

NIÑA:

Guía, como cada siete

de septiembre está en Teror

donde ser fiel al fervor

de sus hijos te promete.

Cuando el camino acomete

para traer su encomienda

qué feliz hace la senda

sabiendo que nació en Guía

el que fundara en su día

esta Romería-Ofrenda.

NIÑO:

Santa María de Guía

la de Bento y de Luján,

la de los quesos que dan

sabor a su medianía.

La que en agosto a María

su eterno amor le declara

y cada septiembre para

pagar promesa y favores,

baja su fe y sus tambores

desde el Lomo de Vergara.

INGENIO

NIÑA:

Aquí está el pueblo que cala,

que lucha, vende cochinos€

y hoy, siguiendo los caminos

de la fe en Teror recala.

Llega Ingenio y te regala

el paso noble y seguro

de un pueblo que, sin apuro,

tal como hace en el calado

con los hilos del pasado

está tejiendo el futuro.

NIÑO:

Llega el pueblo cochinero

que entre la cumbre y la orilla

hace que La Pasadilla

converse con El Burrero;

que enciende el pueblo en febrero

y en agosto El Carrizal,

y cada julio, puntual,

entrelaza sus raíces

con las de aquellos países

que invita a su festival.

LA ALDEA DE SAN NICOLÁS

NIÑA:

La Aldea acude a tu cita,

bendita Virgen del Pino:

más corto se hace el camino

si es para hacerte visita.

Nuestro corazón palpita

siempre en estos días más

por tu fiesta, y además

porque en fechas como estas

nos quedan cerca las fiestas

de El Charco y San Nicolás.

NIÑO:

Y aquí estamos, nuevamente,

a traerte lo mejor

de nuestro pueblo a Teror:

la fe de un pueblo valiente

que siempre tendrá presente

a los viejos aparceros

que en los años más severos

para poder escapar

se tuvieron que dejar

la vida en los tomateros.

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA

NIÑA:

La ciudad capitalina

hace feliz el camino

y ante ti, Virgen del Pino,

regocijada se inclina.

Y tú, Patrona divina,

le brindas todo tu amor

para que ella el honor

de ser capital te preste

porque en días como este

la capital es Teror.

NIÑO:

Te traemos los encantos

que de nosotros esperas:

la Playa de las Canteras,

riscos con nombres de santos,

el Puerto que acoge tantos

destinos en su ensenada,

una Isleta disfrazada,

botes de vela latina,

San Juan, Santa Catalina

Vegueta y el Guiniguada.

MOGÁN

NIÑO:

Mogán llega hasta Teror,

a tus pies, Virgen del Pino,

como pueblo campesino

que también es pescador.

Traemos nuestro calor,

el sol que nos colorea

y el paisaje que moldea

nuestras vidas, el paisaje

que hace que la cumbre baje

a mojarse en la marea.

NIÑA:

Traemos el testimonio

de un pueblo fiel a sus ritos

que canta "Los pajaritos"

el día de San Antonio;

que cobija un patrimonio

de costa y de barranquera,

que pesca y cosecha espera

y hace triangular su historia

de Arguineguín hasta Soria

y de Soria a Veneguera.

MOYA

NIÑO:

La Moya del Pagador,

El Lance, Tomás Morales,

San Fernando, Fontanales,

y el infinito verdor,

llega otra vez a Teror

junto a toda Gran Canaria

a elevar en su plegaria

su festivo testimonio

en nombre de San Antonio,

San Judas y Candelaria.

NIÑA:

Moya la de la dulzura

de suspiros, de turrones

de bizcochos€, tradiciones

donde el pasado perdura;

Moya, que desde la altura

desciende a espumas y escamas

y que guarda entre las ramas

de los árboles tranquilos

del paisaje de Los Tilos

la memoria de Doramas.

SAN BARTOLOMÉ DE TIRAJANA

NIÑA:

Llega San Bartolomé

de Tirajana a la ofrenda

atravesando la senda

de la costumbre y la fe.

Aquí llega el pueblo de

las dunas y de las lomas,

de Pancho Guerra y sus bromas,

el que más terreno abarca,

el del Barranco, La Charca

y el Faro de Maspalomas.

NIÑO:

Traemos de nuestros pagos

desde Juan Grande a El Pajar

y de Ayacata hasta el mar

la fe por nuestros Santiagos,

las oraciones y halagos

que cada uno te hilvana,

la esperanza en el mañana

y un corazón que te ofrezco

en nombre del gigantesco

barranco de Tirajana.

SAN MATEO

NIÑO:

A la plaza de Teror

llegan los de San Mateo

con el humilde deseo

de dar de sí lo mejor.

Llega el pueblo agricultor

que del surco no se aleja,

el pueblo donde se deja

la cumbre ser medianía

y se alza el ojo vigía

de la Montaña Cabreja.

NIÑA:

Llega a Teror a ofrendar

y a pedir dicha y salud

la ferviente multitud

que aplaude a su Tinamar;

la que sabe homenajear

a todos sus labradores;

aplaude a los trilladores

y corredores caballos

y la que todos los mayos

llena a Fátima de flores.

SANTA BRÍGIDA

NIÑA:

Santa Brígida derrama

sus ilusiones, sus retos,

sus preguntas y secretos

sobre la fértil Bandama;

y cada vez que reclama

la respuesta más certera

el paisaje, a su manera,

responde y por él se entiende

que igual que a El Pico se asciende

se desciende a La Caldera.

NIÑO:

Ya Santa Brígida está

nuevamente en esta plaza

por la que todo el que hoy pasa

lo mejor que tiene da.

Y hoy nuestro pueblo dará

a la patrona del Pino

el sentir noble y genuino

de una villa laboriosa

que hace en La Atalaya loza

y que hace en El Monte vino.

SANTA LUCÍA

NIÑA:

Aquí está Santa Lucía:

la que es viento en Pozo Izquierdo,

es en Rosiana recuerdo

y en Ansite, profecía.

La que en Guriete es vigía

de un barranco legendario,

en todas partes el diario

esfuerzo por ser fecundo

y una síntesis del mundo

en Balos y en Vecindario.

NIÑO:

Te ofrendamos el pastor

que llegó a Casa Pastores

y se dejó sus mejores

años en esa labor;

el sufrido agricultor

siempre del cielo pendiente,

el pasado y el presente

de un pueblo noble y maduro

y las ganas de futuro

con las que vive su gente.

TEJEDA

NIÑO:

Venimos de la hermosura

de un gigantesco barranco

que se salpica de blanco

en el mes que menos dura;

de la imponente figura

del Bentayga que nos cuida;

de un pueblo lleno de vida

con un paisaje que asombra

al que despierta la sombra

del Nublo recién nacida.

NIÑA:

Llega hasta Teror Tejeda

para que la Virgencita

a nuestra tierra bendita

prosperidad le conceda.

Traemos la fe que hospeda

nuestro pueblo campesino,

el del bienmesabe, el vino,

el que las almendras parte

y sus septiembres reparte

entre El Socorro y el Pino.

TELDE

NIÑO:

Aquí llega Telde para

contarte que es, con orgullo,

acequia en Lomo Magullo

y arena de Melenara;

memoria y raíz en Tara,

eco vivo del Faycán,

que es en Rosiana volcán,

que en Cazadores es risco

y que es también San Francisco

y San Gregorio y San Juan.

NIÑA:

Aquí están La Majadilla,

Jinámar, Lomo Bristol,

San Antonio, El Caracol,

Marpequeña y La Pardilla,

El Ejido€ Maravilla

ver tantos de Telde aquí,

que vuelven a decir sí

a la fe que les despiertas

y hoy abren las Cuatro Puertas

de su alma para ti.

TEROR

NIÑA:

Aquí está Teror, tu casa,

el corazón de la fe,

el de La Cruz, San José,

el de tu iglesia y tu plaza;

el que con versos enlaza

a las ánimas su ruego,

y como si fuera un juego

llena su plaza de brillo

cuando un barco y un castillo

conversan, pero con fuego.

NIÑO:

Aquí estamos tus vecinos:

los de tu Villa Mariana,

la que esta tarde y mañana

se llena de peregrinos;

y es que todos los caminos,

todos los itinerarios

vuelven más hospitalarios

a tus hijos de Teror,

que han de compartir tu amor

con todos los grancanarios.

VALLESECO

NIÑO:

Arriba el pueblo vecino

nuevamente al de Teror

para abrazarse al fervor

por nuestra Virgen del Pino.

Ha vuelto a hacer el camino

y ante ti dice presente;

trajo el amor de su gente

su esfuerzo, su fe, sus ganas,

el olor de sus manzanas

y su fe por San Vicente.

NIÑA:

Valleseco es seco, pero,

de las aguas que se aferran

al subsuelo y que sí encierran

Madrelagua y Valsendero.

Allí el frío es traicionero

y aguantarlo, un desafío,

sin embargo el pueblo mío

vuelve a mostrar en Teror

cómo sabe dar calor

un pueblo de tanto frío.

VALSEQUILLO

NIÑA:

Valsequillo en romería

llega a traer la costumbre

de un pueblo que sabe a cumbre

y que sabe a medianía;

donde cantan todavía

su tradición los rancheros;

donde todos los febreros

un generoso paisaje

se embellece con el traje

blanco de los almendreros.

NIÑO:

Nuestro Valsequillo sabe

a almendra, a guinda y a fresa

y a la infinita belleza

que entre sus linderos cabe.

Tiene el sabor de la suave

yerba que viste su piel,

la del Roque Grande, fiel

guardián de un pueblo fecundo

y la del ancho y profundo

Barranco de San Miguel.