El Gobierno de Canarias considera que el vertido de petróleo que ha ocasionado el cierre de dos playas en Gran Canaria "no es nada" en comparación a una marea negra como consecuencia de las prospecciones petrolíferas.

"Este vertido debe servirnos para tener en cuenta que no es nada comparado a lo que podría ocurrir si hubiera una marea negra como consecuencia de la iniciativa de Repsol, respaldada por el Ministerio de Industria del Gobierno de España, de realizar prospecciones en las costas de Canarias con la idea de explotar yacimientos si los hubiera", ha aseverado el portavoz del Gobierno canario, Martín Marrero, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno.

Estas declaraciones se producen después de que el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana haya cerrado al baño la playa y piscinas naturales de Castillo del Romeral y la playa del Águila, tras detectarse vertidos de petróleo.

El Gobierno canario confía en que los técnicos puedan determinar cuanto antes que se puedan reabrir al público las dos playas, ya que su cierre se produce en una semana con gran demanda turística de foráneos y residentes, informa EFE.