Un total de 280 jóvenes teldenses, con edades comprendidas entre 14 y 30 años, dieron la nota este verano. El zumbido de los platillos de la batería o el pellizco de las cuerdas del contrabajo se convirtieron en un descubrimiento "de lo más pegadizo" para los participantes de la primera edición del ciclo de masterclass, que organizó el área de Juventud del Ayuntamiento de Telde durante las vacaciones de verano. La iniciativa, celebrada en once sesiones, constituyó un acercamiento de las artes escénicas a los jóvenes del municipio.

El acceso gratuito a la cultura, en los tiempos que corren, se ha convertido para muchos en una utopía. Si además el encuentro con las artes se vuelve íntimo y está dirigido por ponentes de la talla del director de teatro Israel Reyes y la cantante Beatriz Alonso, cobra aún más relevancia.

Durante estos tres meses de verano, un grupo de 280 jóvenes "inquietos" y amantes de la cultura compartieron espacio, risas y ganas de experimentar nuevas actividades. Mientras algunos era la primera vez que lucían nariz roja de payaso o que se dejaban llevar por la percusión en presencia de bailarines, otros tomaban nota de consejos prácticos para su vida profesional.

Para Jorge Rodríguez, quien lleva la mitad de su vida agitando las baquetas sobre los platillos de la batería, el taller estival en la Casa de la Juventud no solo le sirvió para "aprender algunos nuevos ritmos" sino también para "perfeccionar la técnica". El percusionista Javier Montero, batería en la Gran Canaria Big Band, se encargó de acaparar la atención durante dos sesiones en fin de semana de un público "entusiasmado" por el sonido que producen los discos de metal.

"Lo más que me llamó la atención es lo provechoso que puede llegar a ser mezclar aficionados con profesionales en un mismo espacio", explicó el joven Rodríguez de 30 años de edad.

Desde el punto de vista del profesorado, Sebastián Gil, culminó su taller de improvisación y lenguaje de jazz con "más que un buen sabor de boca".

El docente aplaudió la iniciativa del municipio de Telde por "sacar del aula la enseñanza musical y llevarla a los espacios cercanos de la población de manera espontánea", explicó ayer el profesor del Conservatorio Superior de Música en Canarias en tono afanoso.

Las once sesiones de masterclass, que tuvieron lugar desde el pasado 20 de junio al 20 de septiembre, supuso un lugar de encuentro para muchos jóvenes con ganas de iniciarse en las disciplinas artísticas.

Con un presupuesto superior a 5.000 euros, el área de Juventud del Ayuntamiento de Telde ofreció desde talleres de proyección de voz hasta de expresión corporal, danza, música en el cine pasando por la práctica de instrumentos como la guitarra o la batería.

El responsable de Juventud en Telde, Francisco López, apostó por celebrar los cursos no solo en espacios municipales sino también al aire libre, como en la playa de Melenara.

"El fin es encauzar el desarrollo de los jóvenes mediante el conocimiento global de las disciplinas artísticas y crear un espacio dinamizado por la cultura en el que los participantes puedan intercambiar experiencias", añadió López.