El presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna, se plantea devolver las competencias a Melchor Camón si el próximo lunes le ofrece una explicación convincente sobre la propuesta que motivó su destitución como vicepresidente ejecutivo del Patronato de Turismo. Se trata una solicitud económica de una secretaria de dirección de ese organismo, que considera que su sueldo debe adecuarse a sus funciones y responsabilidades, y que frenada por el Servicio de Intervención del Cabildo.
Tras las presiones del PP y de varios miembros de su gabinete, Bravo de Laguna se ha mostrado dispuesto a dar marcha atrás cuando conozca la versión del consejero de Turismo, que ayer prefirió guardar silencio sobre esa posibilidad para no complicar aún más la tensa relación entre el presidente y los miembros del gobierno que siguen fieles al PP.
Carlos Sánchez, portavoz del grupo Popular, confirmó que Bravo de Laguna podría devolver a Camón las competencias que le retiró el pasado lunes. "Yo confío en que cuando vuelva de Estados Unidos y le dé las explicaciones al presidente, si son convincentes, se le devuelvan sus delegaciones en el Patronato de Turismo", apuntó.
El argumento que esgrimen los representantes del PP es que un reparo de Intervención sobre un asunto laboral no es motivo para destituir a nadie. "Si ese es el argumento de Bravo de Laguna, tendría que echarlos a casi todos", bromeó uno de los consejeros consultados. A lo largo de este mandato se han realizado numerosos gastos con reparos del interventor, incluso del propio Patronato de Turismo. Por ejemplo, las actuales facturas del servicio de mantenimiento de la red de carreteras también tienen reparos de Intervención porque no están amparadas por ningún contrato. En esos casos, los servicios jurídicos emiten un informe y se levantan las objeciones.
En declaraciones a este periódico, Camón se mostró convencido de que ha actuado correctamente, pero optó por el silencio hasta entrevistarse con Bravo de Laguna. Horas antes si reconoció a la Cadena Ser que ha mantenido algunas diferencias con Bravo de Laguna, entre ellas la de declarar el Oasis de Maspalomas como Bien de Interés Cultural (BIC). Al respecto, insistió en que "ha podido haber diferencias de criterio, pero una vez tomado el acuerdo, todo el gobierno la ha respetado".
Ruptura
En un debate en Televisión Española, Bravo de Laguna dijo que hablará con Camón y, una vez reciba sus explicaciones, decidirá si le devuelve o no sus competencias en el Patronato de Turismo, aunque reiteró que es un tema "complicado". El presidente insular se refirió a su ruptura con el PP y afirmó que ha abandonado esa formación porque se sintió marginado en la elaboración de la candidatura al Cabildo, a la que se ofreció hasta el último momento. "A mí me han echado del PP", subrayó.
Bravo de Laguna declaró que no se considera un tránsfuga y consideró que la dirección del PP no ha tenido en cuenta las encuestas que le colocaban como mejor candidato para encabezar la lista. No obstante, aseguró que no le mueve el afán de venganza. Respecto a su hijo Lucas, dijo que no tiene claro que el PP lo lleve al Cabildo y que él se hubiese marchado del PP aunque su hijo fuera el candidato.
