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Agüimes

Satocan y Otech dan el primer paso para abrir la ITV de las plataformas

La empresa canario-noruega amplía a 92.400 metros cuadrados la concesión de suelo en la Zona Franca del puerto de Arinaga

Juan Miguel Sanjuán (Satocan). LP / DLP

Las empresas Satocan y la noruega Otech amplían hasta los 92.431 metros cuadrados la solicitud de concesión de suelo de dominio público en la Zona Franca del Puerto de Arinaga, para la construcción de un centro de servicios integrados a la industria subacuática, y ligada al control de calidad de la alta tecnología que usan las plataformas petrolíferas a profundidad.

La ITV de las plataformas petrolíferas. Así describen los propios técnicos el proyecto que ha puesto en marcha la unión temporal de empresas formada por grancanarios y noruegos. Otech cuenta con un centro semejante en Bergen, donde da empleo a casi 2.000 personas. Pero ahora, esta nueva compañía que sumará capital canario, pretende ampliar desde Gran Canaria sus servicios especializados en actividades subacuáticas, reparación y mantenimiento de plataformas para la extracción de petróleo que operan en el mercado africano, Mediterráneo y hasta América.

Los inversores han solicitado una concesión a la Autoridad Portuaria de Las Palmas de 92.431 metros cuadrados en la Zona Franca de Arinaga. Eso supone más de un tercio del suelo disponible, que ronda los 250.000 metros cuadrados. En estos momento sólo está ubicado en esta punto con ventajas tributarias un negocio de suministro de combustible, con lo cual le dará un salto de relevancia a la urbanización empresarial.

Las empresas pretenden usar Arinaga para probar alta tecnología en el mar, antes de que pueda aplicarse en las grandes perforadoras a mucha profundidad.

Satocan y Otech ya mantuvieron una reunión con el alcalde de Agüimes, Óscar Hernández, y miembros de la Corporación, que secomprometieron a acelerar la aprobación del proyecto, una vez cuente con la concesión portuaria, dado el interés económico y laboral para el municipio y la Isla.

Los primeros datos apuntan que la inversión privada podría alcanzar los 30 millones de euros. Y, además, el proyecto requerirá personal cualificado cuando esté a pleno rendimiento.

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