La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

XXVIII Festival del Sur Cumbre teatral en Agüimes

Entre Lazarillo de Tormes y Suleimán

"El hambre es el único instinto que no admite engaño", explica Jaime Santos, que ofrece al pícaro

Representación de 'El Lazarillo de Tormes', ayer, en el festival. SANTI BLANCO

Del Lazarillo de Tormes a Suleimán. El hambre más que el hombre está en escena. El XXVIII Festival del Sur de Agüimes, que engloba a once compañías de teatro de tres continentes (América, África y Europa), comenzó ayer con la participación del público más joven. 656 alumnos de los centros de educación secundaria asistieron ayer a las dos sesiones matutinas de El Lazarillo de Tormes, que representó la compañía La Chana Teatro, de Castilla y León, dirigida por Jaime Santos, en el Teatro Cruce de Culturas de Arinaga.

Por la tarde la compañía Ymedioteatro, de Andalucía, hizo con Sie7e un innovador espectáculo para todos los públicos que fusiona el teatro de calle con el de sala. "Se trata de un espectáculo curioso con funciones de diez minutos a las que solo pueden asistir quince personas ya que se celebra en una furgoneta reconvertida en un mini teatro de poco más de siete metros cuadrado", explicó ayer a este periódico el concejal de Cultura de Agüimes y director del XXVIII Festival del Sur (Encuentro Teatral Tres Continentes), Francisco González.

Hoy jueves, de seis de la tarde a nueve de la noche, la furgoneta-teatro seguirá con su espectáculo en la calle desde la playa de Arinaga, en la avenida del Polizón. Por la noche, a las nueve, la compañía boliviana Teatro de los Andes y Arístides Vargas representará Mas en el teatro Cruce de Culturas.

Anoche se estrenó oficialmente el festival con la obra Me llamo Suleimán, de Antonio Lozano, exconcejal de Cultura de Agüimes, en el Teatro Auditorio de este municipio del sureste, por parte de la compañía canaria Una hora menos.

González destacó "la altísima calidad de la edición de este año", que calificó como "probablemente la mejor hasta ahora". El director y edil señaló que "el Ayuntamiento de Agüimes ha hecho un esfuerzo porque ésta es la única posibilidad que hay actualmente en Canarias para disfrutar a la vez de compañías de teatro de África, Latinoamérica y Europa".

África está representada por Burkina-Fasso y Senegal, Latinoamérica por Bolivia y Argentina, y Europa por Italia y España. Hay compañías de Canarias, País Vasco, Madrid, Valencia y Andalucía.

El director de La Chana Teatro, Jaime Santos explica que "la historia del Lazarillo de Tormes es una historia del hambre más que del hombre. Por lo tanto hay más garbanzos que filosofía en ella, más estómago que ingenio, más apetito que picaresca, menos lirismo y más jugo gástrico. Piensen en el Lazarillo como un menú de guisos bien cocidos a lo largo de casi cinco siglos, donde los sabores se han ido decantando en ideas, donde las esencias han macerado la carne y sus pecados".

Según su responsable, La Chana Teatro Jaime Santos. no ha reinventado el clásico, "ha cambiado tan sólo la forma de leerlo: el lector se transforma en comensal y ante él desfilan los platos. Alimentos contundentes, aleccionadores, irónicos, tercos, cabrones. Es la vida: todo lo que engorda también mata. Ustedes creen que esto no son más que metáforas, pero el hambre es el único instinto que no admite ningún engaño".

Por otro lado, la obra Me llamo Suleimán es la adaptación teatral de la novela homónima escrita por Antonio Lozano. Cuenta la historia de Suleimán, un niño que harto de la terrible situación de pobreza que vive en su país, Malí, decide marcharse junto a su amigo Musa a la próspera Europa. Allí esperan trabajar y conseguir suficiente dinero para regresar y montar sus propios negocios para ayudar a sus familias, pero el viaje es duro y difícil. Deberán cruzar el desierto en camiones incómodos y atestados de expatriados que como ellos buscan una vida mejor.

Llegarán los huidos de Mali hasta la frontera con Melilla, pero allí el cruce de la verja se complicará. Sin embargo Suleimán no se dará por vencido y volverá a intentar el viaje, esta vez por mar. En escena Isabel, una compañera de clase de Suleimán, es la encargada de narrar esta historia, que no es otra que la del viaje que es capaz de emprender un niño con el único fin de alcanzar sus sueños. Toda una historia y una vida admirables.

Compartir el artículo

stats