El temporal de lluvias que ha castigado a Gran Canaria durante los últimos días apenas se ha reflejado en las presas de la Isla, que están a menos del 20% de su capacidad. Es el caso de Chira y Las Niñas, donde el agua ha subido entre tres y cuatro metros en los últimos días, según apuntaron ayer los vecinos del lugar.
"En tres días el embalse de Chira ha subido tres metros de agua, pero teniendo en cuenta que esta presa estaba vacía, aún tiene que caer mucho para que se llene", afirmaban los vecinos, destacando que el mayor día de lluvia se registró el sábado, "pero fue una lluvia fina, sin destrozos, apenas algunas piedras en la carretera".
Aún así, durante la mañana fueron llegando visitantes de otras partes de la Isla, como Teror, Santa Lucía, Las Palmas de Gran Canaria, e incluso del Sur, que esperaban encontrar los embalses llenos.
"Venimos de Teror y de San Lorenzo, cogimos por la ruta de Tejeda y por esa zona está el campo muy verde pero apenas se ven cascadas, y las presas están muy vacías todavía", señalaron Idaira Rodríguez, José Pérez y Borja Moreno.
La mejor panorámica se la llevó el denominado barranco del Negro, donde las cascadas desde la parte alta de la cumbre fue la estampa más fotografiada del día. Hacia el mediodía, los coches se iban parando a la derecha de la carretera porque todos, grandes y pequeños querían contemplar las vistas y acercarse a los riachuelos formados en el barranco. "Quiero bañarme, que yo no tengo frío" le suplicaba el pequeño Aitor, de cinco años, a su madre nada más divisar la primera cascada, pero no obtuvo la respuesta esperada, no en vano en aquel momento la temperatura era de 16 grados.
Bibiano Quintana y Antonia Díaz, de Montaña Alta de Guía, también madrugaron para hacer la ruta de las presas. "Hemos ido a la presa de Los Pérez, Lugarejos, pero son presas muy pequeñas que tienen bastante agua, quizás les falta unos 40 centímetros para llenar. Luego fuimos al Hornillo, a ver las cuevas que están en los riscos", afirmó la pareja que seguían rumbo a Chira.
Ayacata fue quizás la zona donde más agua ha caído estos días, según apuntó Francisco Rodríguez López, del restaurante La Candelilla, que cada día registra la cantidad de agua de lluvia caída durante 24 horas. "En la última semana ha caído casi la misma cantidad de agua que en 2014. Desde el anterior domingo hasta hoy -por ayer-, se han registrado 209 litro, mientras que en todo el año pasado cayeron 214 litros".
El día que más llovió, según los datos de Francisco Rodríguez, fue el sábado 17 de octubre, que se recogieron 75,5 litros de agua y el anterior, 32,5 litros. El viernes 23 y el sábado 24, la lluvia dejó 34 y 33 litros respectivamente.
Otros vecinos de Ayacata destacaban que el temporal ha dejado lluvia estos días en la zona, "pero todavía tiene mucho que caer para ver las presas llenas".
En la GC 905, en dirección a la presa de Las Niñas, también se divisaban ayer algunas escorrentías, pero menores que la del barranco del Negro, hilos de agua y algunas piedras sobre el arcén de la carretera que delataban el paso moderado de la borrasca los días anteriores.
El acceso a la presa de Las Niñas, permanecía ayer cerrado tras decretar la alerta el viernes el Cabildo grancanario. Aún así muchos coches iban llegando a lo largo del día con la intención de disfrutar de las instalaciones de este espacio que se encuentra dentro del Parque Rural del Nublo.
"Ha sido un palo llegar hasta aquí y ver que nos podemos pasar. Llueve muy poco y la carretera está en buenas condiciones, no sé a que viene esto", se quejaban algunos visitantes.
Esta área recreativa está completamente rehabilitada desde el pasado mes de febrero, y suele ser uno de los puntos más visitados tanto por los grancanarios como por los turistas. La zona de acampada, creada en los años 60, está vinculada al patrimonio cultural y de ocio medioambiental de la Isla. "El embalse ha subido en los últimos días cuatro metros, ahora ronda los 17 de los 32 metros, un 20% aproximadamente de su capacidad", afirmaron los operarios del Cabildo.
Soria, que confluye entre Mogán, San Bartolomé de Tirajana y Tejeda, es la mayor presa de toda Canarias y la única con forma de bóveda que tiene el archipiélago. Ayer era la que menos cantidad de agua mostraba a los visitantes, quizás por su gran tamaño, no en vano se trata de una presa de hormigón de 120 metros de altura y una capacidad de embalse de 32.000.000 metros cúbicos. Es la única que nunca ha rebosado, y el máximo que ha registrado en su historia no llega a la mitad de su capacidad.
"Llegamos hasta aquí pero lo que realmente vale es el paisaje, que es maravilloso, sobre todo el de la cascada que se forma desde la presa de Las Niñas hasta aquí, aunque pensábamos encontrarnos más agua, la verdad, ahora sólo cae una pequeña cortinilla. En cuanto a la presa, está muy vacía", comentó Jacinto Marrero que, acompañado de su mujer, visitaron ayer la ruta de las presas grancanarias, desde Chira hasta Soria. "Aunque aún no haya mucha agua, siempre es un placer recorrer estos rincones de nuestra Isla, que, la verdad, merecen un poco más de atención, sobre todo las carreteras, se podrían ensanchar un poco, tenemos que cuidar más lo nuestro", concluyeron.
