Las consejerías de Obras Públicas y de Medio Ambiente del Cabildo de Gran Canaria colaborarán en la campaña de recogida de pollos de pardela para que emprendan su emigración hacia Sudamérica sin que las luces los desorienten, por lo que las luminarias serán bajadas y el Viaducto de las Arenas apagado durante las dos semanas que dura este proceso migratorio.

Las luces de carreteras y edificios no solo ciega a los pollos y los desorientan, sino que por ello caen a tierra, donde la implicación ciudadana también juega un importante papel en su recogida y entrega. El consejero de Medio Ambiente, Emergencias y Participación, Juan Manuel Brito, agradeció este miércoles a su compañero de Obras Públicas, Ángel Víctor Torres, su implicación en la campaña. "Lo fundamental es que caigan deslumbrados el menor número de ejemplares posibles, y en ese sentido la decisión de la Consejería de Obras Públicas es muy importante", señaló.