El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, aseguró ayer que el próximo lunes el Consejo de Gobierno de la corporación insular aprobará la creación del Consejo Insular de la Energía, órgano con el que se quiere avanzar en el cambio de modelo energético de la Isla. Morales anunció además, que este Consejo albergará al nuevo Consorcio de la Energía, en que participarán los municipios, y las organizaciones ciudadanas que quieran participar en la puesta en marcha de parques eólicos, y entre sus funciones estará ofrecer asesoramiento a la creación de empresas, proyectos de auto consumo, y la puesta en marcha de acciones encaminadas a la soberanía energética de la Isla.

Reproducir el modelo de desarrollo del Sureste, comarca pionera en la apuesta por las renovables, es lo que el que fuera alcalde de Agüimes pretende hacer desde el Cabildo. Así, apuntó como en los municipios del Sureste los vehículos fueron sustituidos por modelos eléctricos con su correspondiente aerogenerador para verter a la red la energía que consumen, lo que ha permitido un ahorro de varios euros por cada cien kilómetros.

No obstante, Morales insistió en la falta de voluntad política para lograr la penetración de estas energías, y expuso como dato el que se mantengan las primas a los combustibles fósiles, o las reticencias de AENA a modificar las señales de las servidumbres aeroportuarias y retirar las obsoletas para que no sirvan de impedimento a la instalación de aerogeneradores en la zona. Por su parte, la representante de Greenpeace, Marina Bevacqua denunció la inseguridad jurídica que existe en las Islas para invertir en las renovables.

Asimismo, Emily Rochon recalcó que la energía convencional es más cara de producir en Canarias y que el Archipiélago cuenta con las mejores condiciones para ser renovable en 2050, y evitar así ser uno de los territorios más afectados por el cambio climático. Si bien resaltó la alta dependencia de los combustibles fósiles, puso en valor la baja industrialización, o el clima benigno, frente a desventajas como la necesidad de producir agua potable, y el hecho de que el turismo haya elevar el consumo por encima de la media nacional.

A este respecto, el presidente del Cabildo anunció que la corporación contará con una oficina desde la que se hará un seguimiento al cambio climático, cuestión que junto a la creación del Consejo de la Energía llevará al próximo pleno. "Canarias será un escenario brutal del cambio climático pues va a producir un crecimiento del nivel del mar" sentenció. El desvío de los alisios, que soplarán más desde el Este, también repercutirán sobre la Isla, y será en el Noroeste y en el Sur de Gran Canaria donde el efecto en el mar será más notorio, según explicó el presidente insular.