Estimado presidente:

Desde la Asociación de Empresarios de Alojamientos Turísticos (AEAT) queremos manifestar lo siguiente ante determinados situaciones que afecten a nuestro sector:

Es evidente que los conflictos generados en el Norte de África y Oriente Próximo en los últimos años han influido en las cifras de ocupación de los establecimientos turísticos de nuestra provincia. Es cierto también que esto ha provocado que algunos turistas se hayan alojado en plazas que en otro contexto no se habrían ocupado, que conforman una oferta ilegal de camas que no se acogen a la normativa vigente.

Sin embargo también es cierto que muchos de nuestros asociados han emprendido las reformas necesarias para mantener sus establecimientos como una alternativa de calidad, cada uno dentro de su correspondiente categoría. Estas reformas, encaminadas a conseguir un justificado aumento en su valoración en estrellas, no han podido beneficiarse en gran parte de los casos de los incentivos establecidos al efecto en la Ley de Modernización y Renovación Turística, ya que la mayoría de los inmuebles a reformar no cumplen con los estándares que se exigen actualmente en cuanto a superficies, plazas de aparcamiento y otros aspectos. En el intento de solventar estos obstáculos obteniendo las pertinentes dispensas por parte de la Administración, a menudo se provoca una situación de parálisis y retrasos que disuade a los empresarios de su ímpetu inicial de renovación, tal y como manifestamos a la Consejera de Turismo del Gobierno de Canarias y a todo su equipo en nuestra reciente reunión de trabajo.

La figura del Comité de Proyectos Estratégicos aparecida en el último año para agilizar los trámites en las administraciones públicas en proyectos de especial relevancia, puede y debería por tanto, considerar dentro de sus responsabilidades todo lo que implique mejora y renovación del destino que aún quede pendiente, tanto en el ámbito alojativo, como en centros comerciales y de espacios públicos, acorde a los propósitos del Gobierno en cuanto a modernización en el sector.

Esto implica que su labor afecte no sólo a nuevas inversiones, sino a aquellas que se realicen para recuperar las zonas más veteranas, que por razones obvias fueron las primeras en desarrollar el turismo en nuestras islas, con la oportunidad de reincorporar plazas a la legalidad. Así se garantizaría no ya la creación de nuevos puestos de trabajo, sino la continuidad de los ya existentes, que de otra forma acabarán desapareciendo.

Desde esta óptica y como caso ejemplar, debería considerarse el Oasis de Maspalomas y al conjunto de los proyectos paralizados en su entorno como de interés estratégico, ya que si se perpetuase la situación de deterioro y obsolescencia tanto de los hoteles como del centro comercial, se estaría frenando la posibilidad de ofrecer unos productos actualizados, de mayor calidad y con más capacidad de generar y mantener el empleo en el tiempo.