El proyecto de la familia Kiessling para construir un parque acuático en el sur de Gran Canaria va superando uno a uno todos los trámites. Ayer salvó uno más con la aprobación por el Gobierno de Canarias del Plan de Modernización, Mejora e Incremento de la Competitividad (PMMIC) en el ámbito de El Veril y ahora al proyecto ya solo le falta la licencia municipal, que el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana está obligado a agilizar, dada la condición de inversión estratégica del equipamiento turístico.

Con anterioridad al paso de ayer, también en Consejo de Gobierno se había aprobado el proyecto de decreto para agilizar la construcción del parque acuático Siam Park en el municipio de San Bartolomé de Tirajana considerándolo una inversión estratégica para el Archipiélago.

Además, el Ejecutivo canario aprobó el pasado 9 de noviembre la suspensión para la zona de El Veril de los planeamientos insulares. En concreto, suspendió el Plan Insular de Ordenación de Gran Canaria y el Plan Territorial Especial del Corredor de Transporte Público con Infraestructura Propia y Modo Guiado entre Las Palmas de Gran Canaria y Maspalomas (PTE-21), con el fin de allanar el terreno a la ordenación del parque acuático sin perjudicar la continuidad del trazado de la línea ferroviaria prevista.

El expediente de aprobación del Plan de Modernización de El Veril, iniciado por Resolución de la Dirección General de Ordenación del Territorio, ha pasado por todos los trámites de información pública, y cuenta con los informes favorables del Cabildo de Gran Canaria, del Consejo Insular de Aguas, del Ministerio de Industria, de Fomento y de Agricultura, así como del Ayuntamiento de Mogán y de San Bartolomé de Tirajana. También ha sido sometido a la preceptiva evaluación ambiental estratégica.

Por su parte, el Cabildo de Gran Canaria también ha ido facilitando los trámites que permitirán contar con el nuevo negocio turístico de los Kiessling en el sur de la Isla. El último trámite en este sentido, completado a finales de noviembre pasado, fue la aprobación por el Consejo Insular de Aguas de las obras de canalización del barranco de El Veril. Solo este proyecto, básico para la construcción posterior del parque acuático, se calcula que costará unos dos millones de euros, según informó el pasado 25 de noviembre el director general del Consejo Insular de Aguas de Gran Canaria.