Un grupo de jóvenes de Santa Lucía participa en el diseño de un espacio para patinar en el Parque de El Taro que tiene la peculiaridad de convivir con el uso tradicional del equipamiento ocio.
El del Parque de El Taro, en el casco antiguo de El Doctoral, será el primer skateplaza de Santa Lucía, un lugar respetuoso con su entorno y que con una mínima transformación puede albergar un nuevo uso lúdico. Para que se pueda patinar en este lugar es necesario adecuar el suelo, colocar bordes metálicos en bancos, parterres, maceteros y dotarle de medidas de seguridad, lo cual implica instalar barandillas en escaleras, entre otros arreglos.
El proyecto del skateplaza de El Taro surge de un grupo de jóvenes asiduos al patinaje con monopatín y gracias al Punto J, lugar al que se acercaron para proponer la construcción de un nuevo parque para patinar adaptado a la actualidad y a las necesidades de un colectivo en auge en el municipio.
La idea que proponen consiste, según explica la concejala de Juventud, Minerva Pérez, en "darle una nueva vida a un espacio que ya existía, respetando el medio ambiente y creando espacios de convivencia entre amantes del monopatín y personas que no lo son, menores y adultos que frecuentan el parque, ya que está situado en una zona del parque de El Taro donde hay canchas de otros deportes, remos y otros aparatos de juego".
El grupo de jóvenes que presentaron el proyecto han colaborado con los técnicos municipales en la creación de los planos y supervisan diariamente el trabajo que está realizando la constructora para que el acabado sea el más idóneo para la práctica del skate. Esta colaboración está en línea con la filosofía que se intenta desarrollar desde el Punto J. Su responsable, Alberto Ojeda, explica que "al igual que propusimos en la remodelación del edificio del Punto J, estamos abriendo la posibilidad de que la propia gente joven del municipio aporte ideas, no solo en cuanto a proyectos de eventos como se hace con la Fábrica de Ideas cada año, sino también en la construcción de nuevos espacios y equipamientos".
La obra, consistente en la sustitución del suelo anterior y la construcción de diferentes módulos, rampas, barandillas, desniveles y olas, responde a una inversión de algo más de 51.000 euros. Parte de ella proviene de fondos europeos del Proyecto Integral de Desarrollo Urbano Urban La Orilla, que ejecuta el Ayuntamiento de Santa Lucía.
