El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, se comprometió en la visita que giró a San Mateo a financiar el nuevo aparcamiento subterráneo de la Vega de 400 plazas, que tendrá un coste de seis millones de euros y el arreglo de la Avenida de Tinamar ascenderá a dos millones más.

"Va a quedar una obra importante para el desarrollo económico de nuestro municipio. Queremos que el mercado municipal de San Mateo, que será modernizado, sea un escaparate para todas esas miles de personas que nos visitan todos los fines de semana y también para el turismo", afirma el alcalde Antonio Ortega, para quien San Mateo "es la capital de las medianías de Gran Canaria. No lo digo yo, sino Los Gofiones. Aquí hay un flujo y movimientos de personas y vehículos que es brutal. San Mateo tiene más flujos de vehículos que la nueva autopista que une Puerto Rico con Mogán. No lo digo yo, sino que son los datos del Cabildo insular", agrega.

"La cantidad de personas que nos visitan los fines de semana produce un estrangulamiento importante en la GC-15 y nosotros llevamos mucho tiempo diciendo que ese problema se soluciona con la construcción de ese aparcamiento subterráneo en la plaza del pueblo con una superficie bajo tierra de 12.000 metros cuadrados y una gran plaza de 6.000. Además, el subterráneo iría unido al aparcamiento de 80 plazas que se está finalizando", añade. Sin embargo, el anterior alcalde, Gregorio González (Alternativa por San Mateo-Nueva Canarias), muestra su total escepticismo ante el anuncio de Clavijo. "Es una obra que hay que empezarla y terminarla lo más rápido posible porque va a hipotecar el municipio durante su ejecución. Como es habitual, las obras que realiza el gobierno de San Mateo se dilatan en el tiempo precisamente porque las hace sin tener el dinero entero consignado. El Gobierno canario solo se ha comprometido a una pequeña partida del todo insuficiente".

El presidente de la Asociación de Empresarios de San Mateo, Pedro González, asegura que ve "con buenos ojos" el proyecto de aparcamiento. Es una obra espectacular que conectará además con el otro aparcamiento y el mercadillo. Mucha gente que hace caminata también suele dejar el coche en el pueblo. Los fines de semana se potencia la actividad en todos los comercios del pueblo".

"El incremento de los visitantes los fines de semana es importante y el público es distinto. Además de los fines de semana, también suelen ser buenos los lunes y los viernes. Las ventas suben en el casco antiguo, donde la gente compra incluso ropa. En mi tienda sube la venta un 20% de media y en los restaurantes puede sobrepasar el 40%. Este es un pueblo de paso que ofrece buenas cosas, por lo que el aparcamiento es fundamental. El domingo hubo colas hasta Santa Brígida, Utiaca y Tenteniguada. El colapso perjudica mucho al pueblo", añadió.

Carmelo Santana Monzón, del restaurante La Brega, señaló ayer que "en este pueblo hacen falta muchos más aparcamientos, sobre todo los fines de semana". Según este restaurador, los fines de semana se incrementa "un 80% o 90% la afluencia de público. En invierno vienen a comerse un potaje con carne de cochino y buen vino. Pero cuando el tiempo está bueno también vienen a disfrutarlo y a pasar el día. Si no tiene aparcamiento, se va a otro sitio".

"No queremos que pase como en Santa Brígida, que llevan una partida de años con un mamotreto feísimo en mitad del casco porque no han podido terminar el centro comercial con quinientas plazas de aparcamiento", afirma Suso Vega mientras debate con Carmita Sánchez. En la calle también se discute por el desarrollo de la obra, no por la utilidad del estacionamiento. En eso todos coinciden en su bondad.

Dos carriles solo de subida en la Avenida de Tinamar solucionarían el estrangulamiento de tráfico que se vive en el pueblo durante los fines de semana, según el alcalde. "Un carril iría directamente a los aparcamientos y el otro sería para los coches que seguirían a Teror y Tejeda. Eso solucionaría atascos de fin de semana".

El alcalde muestra su satisfacción porque cree que el presidente del Gobierno se ha llevado una grata impresión del municipio en su visita del domingo. "Él no lo conocía y ha visto que se trata de un municipio muy comercial, nada que envidiar a otros de Canarias con mucha más población. San Mateo puede triplicar su población los fines de semana y además es una ruta esencial que no puede sufrir más estrangulamientos. La GC-15 es una carretera fundamental", sentencia el alcalde. La obra puede estar ejecutada en 20 meses.