"Es un problema interno de Podemos como grupo político y deben resolverlo entre ellos". Este es el diagnóstico que realizó ayer el presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, ante el rocambolesco conflicto creado entre las dos facciones grancanarias del partido de Pablo Iglesias, cuyas únicas consecuencias por el momento son el cese de la coordinadora y asesora de prensa en la corporación insular, Mari Paz Bernal, y el deterioro de la imagen de Podemos y del propio equipo de gobierno de Morales.

La dirección insular de Podemos, a través de Mery Pita y otros altos cargos, lleva varios días amagando con presentar una solicitud o documento a Antonio Morales para que cambie a los representantes del partido en la comisión de seguimiento del pacto tripartito y en las reuniones del Consejo de Gobierno del Cabildo. Hipotéticamente, el sector oficial de Podemos requerirá a sus socios en el Cabildo- NC y PSOE- que Juan Manuel Brito y María Nebot, los dos consejeros del sector crítico, sean sustituidos por esos órganos por Miguel Montero e Ylenia Pulido, afines a la dirección insular. El argumento para realizar ese cambio es que Brito y Nebot tienen abierto un expediente disciplinario que podría desembocar en la expulsión del Podemos en los próximos meses.

Sin embargo, esa comunicación de Mery Pita no ha llegado al Cabildo y hoy viernes se celebra el Pleno ordinario de enero, por lo que crece la incertidumbre en torno a las disputas internas de Podemos y la oposición se frota las manos, de lo que Morales intenta desmarcarse.

"No he recibido ningún documento ni es cierto que yo le haya dicho a Podemos que no me lo mande o que le haya pedido que me lo envíe; me dijeron que lo iban a mandar y yo les dije que lo miraban bien por si tenía otro tipo de consecuencias, pero yo no intervengo en eso", declaró ayer el presidente del Cabildo, quien sostuvo que esa es una decisión interna del grupo de Podemos, no del gobierno insular. "Yo no tengo más nada que decir, cuando me llegue el documento lo analizaré y si hay algo que me compete a mí, tomaré una decisión; desde luego, si quieren cambiar a los miembros de la comisión de seguimiento del pacto, esa es una cuestión interna de los partidos", recalcó Morales, quien eludió pronunciarse sobre la retirada de Brito y Nebot del Consejo de Gobierno porque desconoce cuáles son las intenciones de Podemos.

El presidente sí quiso dejar claro que este episodio no afecta al funcionamiento de su gabinete. "No estamos preocupados, seguimos trabajando cada uno en su tarea y sin ningún problema; si existiera alguno ya hubiese actuado porque como presidente me corresponde intervenir si veo alguna disfunción. En el gobierno hay absoluta normalidad, es un problema interno que yo respeto y que deben resolverlo ellos", concluyó.