El Pleno del Cabildo rechazó ayer por unanimidad la instalación de la planta de biomasa "en cualquier lugar de Gran Canaria" y también se atrevió a desaconsejar su ubicación en cualquier otro punto del Archipiélago, aunque mostró su respeto a las decisiones que tomen las demás islas.

El grupo de gobierno de NC, PSOE y Podemos presentó una moción que, en principio, estaba destinada a rechazar la planta de biomasa proyectada por la empresa Ence tanto en el Puerto de la Luz como en cualquier otro lugar de la Isla, pero tras debatir sobre los informes del Gobierno de Canarias y del propio Cabildo sobre los riesgos sanitarios y los daños al medio ambiente, los seis grupos políticos estuvieron de acuerdo en "ir más allá" y plantear que lo que "no es bueno para la salud de los grancanarios tampoco lo es para el resto de los habitantes". No obstante, en el texto de la moción se incluyó el añadido de respetar la decisión de otros cabildos para evitar acusaciones de injerencia.