Simón Rodríguez tiene 31 años, y su compañero Antonio Hernández, 37. Ambos lideran un proyecto muy vinculado al mundo rural de la comarca. Lleva por título 'Polinización automatizada de pitahayas' y, en esencia, persigue introducir a gran escala esta fruta, también conocida como fruta del dragón, y que tiene un amplio conjunto de propiedades naturales.
En estos momentos apenas hay en cultivo apenas una hectárea en Gran Canaria, por cuatro en Tenerife, además de las muchas plantas dispersas. Por eso, Simón y Antonio destacan las enormes posibilidades de crecimiento que ofrece. Y para demostrarlo, recurren a la frase de un experto del plan formativo al que asisten en estos días en el que se constata que la demanda europea es equiparable a toda la producción platanera que tiene Canarias. Y, además, con la ventaja de que el producto llegaría a un precio más económico y fresco que sus principales países productores, como son Vietnam y Centroamérica. Sobre todo, añaden, porque esta es una fruta que empieza a perder buena parte de sus cualidades a la semana de ser cortada, y se pierde a los 20 días.
La propuesta de ambos emprendedores, que pusieron en marcha la idea hace cinco meses, es alcanzar una polinización automática a medio plazo, tras lograr una manual, y lograr así que se extienda su cultivo. Y, a partir de entonces, sacar rédito a la pitahaya en campos tan diversos como la fabricación de zumos y ligarlo al sector servicios.
La fruta del dragón concentra un elevado volumen de propiedades. Además de ser exótica, con lo que eso supone para conseguir unos mejores precios en el mercado, es muy nutritiva, es anticancerígeno y antioxidante, tiene el triple de vitamina C que el Kiwi, se da muy bien en las islas porque se adapta a las regiones subropicales y tiene aplicaciones en el campo industrial.
Los promotores esperan también llegar a la Unión Europea por razones medioambientales.
Este es uno de los doce proyectos en marcha. Como también lo es el denominado 'Croquelinas', impulsado por Milagros Salinas. La propuesta que está a punto de ver la luz consiste en una fábrica de precocinados gourmet, empleando para ello productos locales y frescos. Se trata de la elaboración de tapas precocinadas con croquetas de sabores tan sugerentes como plátano, gofio y ron; a queso de flor de la multipremiada quesería de Pavón; almogrote; cochino negro; y chorizo de Teror, entre otros. Son "productos de toda la vida, con los que he experimentado", según su promotora, Milagros Salinas, que ultima su salida al mercado desde su cocina de Santidad Baja, en Arucas.
El objetivo es llegar a los restaurantes, que sólo tendrían que ponerles al fuego en la freidora para poder servirlos. Y con un sabor muy rico, según afirma. Y con el valor añadido de que recurre a productos del Norte y novedosos en este campo.
El programa de apoyo a ideas innovadoras de la Mancomunidad del Norte, que ha contado con un grupo de expertos que han guiado a estos profesionales en su nueva andadura, trabaja en cambios muy varipintos.
María Fabiola Perdomo presentó un proyecto de pastelería y panadería creativa para celiacos, que está hecho a la carta, porque el objetivo es personalizarlo. Para ello se habilitará una página web y una tienda física para tramitar los pedidos. Y la carta recoge pan, bizcochado, bollería, y hasta masa de pizza precocinadas para cualquier evento. Y todo fresco y artesanal.
En el campo del deporte, 'Surf Camp', liderado por Juan Antonio Tacoronte, trabaja en una oferta de turismo activo en Gáldar, con una serie de actividades de ocio y tiempo libre.
'Vámonos de ruta', de Samira Sakhi y Raquel Rosales, se centra en la venta de planes prediseñados para cualquier perfil de cliente, tanto local como extranjero, está dirigido a grupos, y es una oferta alternativa al sol y la playa. Contempla una ruta con distintas paradas en Guía, Moya y una casa rural, con la visita a una casa abandonada conocida como la Casa de Los Miedos, donde se realizará una actividad, para seguir por una ruta de vinos y quesos con juego de pasablalabras del léxico canario o el trivial de la historia canaria, y distintas acciones, para cerrar con un asadero de confraternización.
Nira Rodríguez y Yanira Santana sacan su 'Laboratorio de ideas', que persigue "la mediación cultural y acción crítica para dinamizar una sociedad involucrada en su propia recreación".
'El gusto canario' es el nombre de la empresa auspiciada por César Déniz y Santiago Navarro, basada en el transporte a domicilio de comida de diferentes restaurantes de la zona. El reto consiste en servir al consumidor desde diversos locales, rompiendo la tradicional exclusividad de la comida a domicilio.
La empresa 'Imcom Livestock', de Mario Mas e Isabel Grimón, trabaja en el desarrollo de una ganadería intensiva con bienestar animal, ordeño robotizado y mecanismos de recolección y manejo de purines".
'Lucky Dog' es un proyecto innovador de José Enrique Betancor y Patricia Buso, que reunirá en un mismo espacio todas las necesidades, tanto de los propietarios como de los perros. Ambos son expertos con numerosos títulos sobre el adiestramiento de animales, peluquería y atención canina.
El proyecto de Manuel Hernández bautizado como 'Platinium Canarias' contempla la comercialización de nuevas variedades de frutas, como berrys, en distintos formatos, como natural y deshidratado. 'Valleseco on line' consiste en una plataforma on line de productos, servicios y actividades, liderado por José Manuel Casares.
Y, por último, 'Activity on Canarias', de Guillermo Barreto, con acciones experienciales, tanto individuales como colectivas, en el ámbito gastronómico y ambiental.
