La nueva solicitud de la cadena Riu para reformar su hotel en el Oasis de Maspalomas y una moción del grupo Unidos por Gran Canaria para que se insista en la declaración de esa zona como Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de Sitio Histórico han sacado a relucir las diferencias de los tres grupos del gobierno insular sobre la ordenación urbanística de esa zona de San Bartolomé de Tirajana y no se descarta que NC, PSOE y Podemos voten de forma distinta en el Pleno de mañana viernes cuando se discuta la iniciativa del partido del expresidente José Miguel Bravo de Laguna.
A la espera de una nueva reunión del equipo de gobierno, hoy jueves, para intentar consensuar una posición común, NC apuesta por apoyar la moción de Bravo de Laguna, el PSOE por rechazarla y Podemos baraja la abstención. Los tres grupos están condicionados por lo que han votado anteriormente, reconocieron ayer sus portavoces, por lo que es previsible que rompan la disciplina de voto si no encuentran una alternativa a través de una enmienda transaccional a la moción de Unidos, que siempre dependerá de que Bravo de Laguna la acepte.
En la misma situación se encuentra el Partido Popular (PP), principal grupo de la oposición, que tampoco tiene clara su postura sobre el Oasis en espera de los informes técnicos y tendrá que decidir su voto en el último momento. Aunque los dirigentes del partido critican la paralización de las inversiones turísticas, tres de los seis actuales consejeros del PP aprobaron el BIC en el mandato pasado y apoyaron el recurso contencioso-administrativo que ha frenado en los tribunales el nuevo hotel de Riu. El otro grupo opositor, CC, votará en contra.
El gobierno insular de Antonio Morales maneja hasta tres propuestas técnicas distintas para reordenar el Oasis de Maspalomas, todas ellas con el denominador común de intentar recuperar el palmeral para uso público, lo que choca con los intereses de la mayoría de las empresas hoteleras y los propietarios de esa zona de San Bartolomé de Tirajana.
El Cabildo aún tiene un plazo de dos semanas para tomar una decisión definitiva sobre esa zona turística, pues la solicitud de Riu entró el 22 de febrero y la Ley de Inversiones Estratégicas de Canarias ofrece un plazo de 45 días para contestar, pero la moción de Unidos obliga al gobierno tripartito a expresar su posición en el Pleno Ordinario de mañana.
Carmelo Ramírez, portavoz de NC, recordó que su grupo apoyó la creación del BIC en el anterior mandato y mantiene su intención de recuperar el palmeral del Oasis para uso público, por lo que, "por coherencia", debería apoyar la moción. Ramírez restó importancia a una hipotética división del voto de los tres grupos del gobierno en una moción de un grupo opositor.
Ángel Víctor Torres explicó que el PSOE aplaudió el BIC del Oasis por motivos medioambientales cuando se planteó en 2013, pero en 2014 rechazó la figura del Sitio Histórico por el paso de Cristóbal Colón, tanto desde el Gobierno de Canarias como desde Cabildo, al entender que detrás también había un conflicto empresarial y comercial.
Consecuentes
A la espera de la reunión de hoy, los socialistas votarán en contra de la moción de Bravo de Laguna "para ser consecuentes con lo que se ha hecho hasta ahora", señaló Torres, quien apuntó que "la mejor solución que puede ofrecer el Cabildo es acabar de una vez con este conflicto mediante una propuesta que preserve el entorno del Oasis y evite que se pierdan esas inversiones".
El portavoz de Podemos, Miguel Montero, declaró que su grupo no ha tomado una decisión, pero baraja optar por la abstención. Podemos es firme partidario de recuperar el Oasis para disfrute público y podría alinearse con NC para apoyar el primer punto de la moción de Bravo, el que propone reiterar "la voluntad del Cabildo de mantener el recurso contencioso-administrativo contra la denegación infundada por el Gobierno de Canarias de la declaración del BIC".
No obstante, Podemos tiene más complicado apoyar el segundo punto, en el que se plantea que el Gobierno autónomo transfiera al Cabildo la competencia para ordenar la zona del Oasis a través del Plan Especial que estaba previsto en el BIC. Precisamente, una de las batallas de Podemos contra la nueva Ley del Suelo es para evitar que el Gobierno de Canarias entregue las competencias urbanísticas a los cabildos y ayuntamientos.
Felipe Afonso El Jáber, portavoz del PP, señaló que su grupo sigue a la espera de los informes técnicos que ha anunciado el presidente Morales y, por tanto, no ha definido su posición sobre el futuro del Oasis, aunque sostuvo que hay que buscar "una solución que compatibilice la protección del palmeral con la renovación hotelera". Tres consejeros del PP, Ana Kursón, Lucas Bravo de Laguna y María del Carmen Rosario estuvieron en el gobierno de Bravo de Laguna.
