El grupo Hermanos Santana Cazorla aseguró ayer que la familia Kiessling conocía el litigio sobre los terrenos de El Veril antes de comprarlos y acusó a la sociedad Loro Parque, promotora del parque recreativo Siam Park en esa parcela, de "lanzarse a una aventura en la que pretende retorcer la legalidad exigiendo unos procedimientos abreviados y privilegiados" de los que carecen los demás empresarios del sector.

En respuesta al último comunicado de Loro Parque, en el que esta empresa de Kieesling afirmó que Santana Cazorla no ostenta derechos de titularidad sobre el suelo en el que proyecta construir su parque acuático, el grupo empresarial grancanario sostuvo que es dueño de la mitad de los terrenos de El Veril y puntualizó que esa es la razón por la que ha interpuesto un recurso judicial contra las resoluciones del Gobierno de Canarias y del Cabildo que permiten y agilizan los trámites para la instalación del Siam Park.

Santana Cazorla afirmó ayer que "en el momento en que Loro Parque suscribió la escritura pública de adquisición de los terrenos conocidos por Maspalomas Alto, coincidente con el ámbito de El Veril del Plan General de San Bartolomé de Tirajana, donde quiere ubicar un parque temático, dicha entidad y la familia Kiessling tenían perfecto conocimiento de los derechos de Hermanos Santana Cazorla SL sobre dichos terrenos".

Al respecto, añadió que "fue precisamente Hermanos Santana Cazorla la que puso en conocimiento de la familia Kiessling la situación legal sobre dichos terrenos, al objeto de que tuviese plena constancia de la misma". La situación legal de esa parcela también se le comunicó oficialmente el 21 de febrero de 2014 a Jaime Rodríguez Cíe, representante de Loro Parque.

"Por sentencia firme del Tribunal Supremo de 22 de abril de 2014", explicó, "se confirmó la vigencia del contrato de 10 de diciembre de 1985 suscrito entre la mercantil Hermanos Santana Cazorla SL y los hermanos D. Manuel, D. Juan, Dña. Rosario y Dña. Susana del Castillo del Castillo". Ese contrato afectaba a las fincas recogidas en un plano adjunto a dicho documento, "entre las que se encontraba la conocida como El Veril, enajenada a Loro Parque".

En esa finca y en esos planos, según Santana Cazorla, "se contenían los terrenos que en diciembre de 1985 se proponían para ser incluidos como programables urbanos en las Normas Subsidiarias, quedando dispuesto que Hermanos Santana Cazorla SL un plazo posterior para incorporar las fincas que se programaran con posterioridad a las Normas Subsidiarias en el Planeamiento General". A juicio de Santana Cazorla, el Plan de Modernización de El Veril (PMM) "es precisamente el documento que habilita la programación".

"De todo ello -insistió Santana Cazorla- tuvo noticias Loro Parque, lo que le impide escudarse en la figura del tercero de buena fe. Al contrario, Loro Parque decidió formalizar la compraventa y lanzarse a una aventura en la que pretende retorcer la legalidad exigiendo unos procedimientos abreviados y privilegiados de los que carecemos los demás empresarios del sector".

Santana Cazorla recalcó que "una muestra" de esos privilegios es el intento de tramitar el PMM sin convenios de gestión, sobre el pretexto de que se trata de propietario único, pese a la palmaria titularidad de dominio público hidráulico o a los derechos que asisten a la empresa Hermanos Santana Cazorla SL". En referencia a los recursos judiciales que ha interpuesto, la empresa de Santiago Santana Cazorla señaló que "simplemente se propone instar las acciones pertinentes en defensa de los derechos que le asisten".

Por contra, Loro Parque alega que en la escritura pública de compraventa, suscrita en presencia del notario David Gracia Fuentes, compareció "como parte vendedora de la totalidad del suelo la familia Del Castillo".