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Gáldar

El punto jilorio de Rocío Arévalo

La artista chileno-canaria expone parte de su colección 'El arte de comer' en la Casa Cachazo Verde Aguilar de Gáldar

El punto jilorio de Rocío Arévalo YAIZA SOCORRO

La Casa Cachazo Verde de Aguilar de Gáldar acoge desde el pasado viernes por la tarde una sorprendente exposición titulada El arte de comer, en el que se refleja el momento en el que 17 comensales dan cuenta de un condumio. Es un momento crucial el que retrata la artista Rocío Arévalo, quién a partir de una instantánea fotográfica tomada en el segundo preciso en el que la materia entre a formar parte del dueño del plato elabora una acuarela donde hasta los espaguetis se pueden entregar en color lila.

En un primer momento, el del encuentro del espectador con esta suerte de entullo colectivo colgado de los paramentos de la vieja casona pudiera pensarse que sólo falta pedir la comanda, para a medida que, retrato a retrato, se observa con mayor detenimiento el producto de esta artista chileno-canaria, verse reflejado haciendo exactamente los mismos gestos propios del deglutir en el que entran en juego unos ojos que se entornan al infinito, una boca que saliva e intenta tomar la forma de lo que por allí debe entrar y un gesto corporal que se revira hacia al plato, tanto para asegurar la menor pérdida de la sustancia por tragar como , para prevenir una desastrosa vuelta al plato de la comida, por lo todo lo que supone de protocolo, ese punto intermedio entre la falta de pericia y la malcriadez.

Pone en el prospecto de la exposición, comisariada por Suset Sánchez, y que es una minúscula parte de un proyecto general de la artista denominado Sinestesias, que lo que allí se ve desde este viernes reproduce el "gesto vital, también erógeno, que paradójicamente reproducimos para morder y tragar, escupir y vomitar, por el contrario hablar y narrar". Arévalo, licenciada en Bellas Artes por la Universidad de La Laguna no es la primera vez que pone a masticar su obra. Ya lo hizo con Bistec y papas fritas, Somos lo que comemos y Menú.

Esta muestra se encuentra integrada en la nueva entrega del Circuito Insular de Artes Plásticas, Canarias en vivo, y se suma así a otras exposiciones en las que ha participado Arévalo de forma colectiva, de los que hay que destacar los proyectos IX Feria Internacional de Arte Contemporáneo de Arévalo, en Ávila; Construcciones de Eva, en la galería de arte de la ULPGC; Fashion Art, en el Hotel Urban de Madrid, y Mesa para tres, en la galería Mácula de Santa Cruz de Tenerife.

De forma individual, la obra de Rocío Arévalo también se ha colgado en la Casa de los Coroneles de La Oliva , en Fuerteventura; en el TEA de Tenerife; en la Galería Saro León de Las Palmas de Gran Canaria, y en el Club de Prensa Canaria, con el trabajo La aportación de Miguel Martín-Fernández de la Torre, entre otras.

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