¿En que proceso de colaboración trabajan el Ministerio de Cultura y el Cabildo de Gran Canaria para encauzar la declaración de Risco Caído como Patrimonio Mundial de la Unesco?
Este procedimiento es largo y difícil, aunque también es sencillo. Los ayuntamientos o las comunidades autónomas no son los interlocutores ante la Unesco, sino que siempre son los ministerios quienes informan de la lista indicativa que vaya a presentar. Quien tiene que trabajarlo, en este caso, es el Cabildo, y desde el Ministerio podemos aconsejar a los redactores del expediente, y el Ministerio aconseja en el aspecto formal, pero no lo trabaja directamente.
¿Ha tenido la ocasión de visitar el lugar?
Sí. Esta mañana -ayer-. Pero no fue el día más adecuado para ver el efecto lumínico. Nos lo han explicado clarísimamente, bueno, para entender su complejidad. Vimos la caldera, el Bentayga y otras zonas.
Comparado con otros casos, ¿qué posibilidades le augura a este proceso de designación?
No lo puedo decir, porque será el Comité de Patrimonio Mundial en su sesión anual quien decida si Risco Caído reúne los valores de universalidad excepcional. Ni yo como técnico, ni el Ministerio de Cultura, lo podemos decir. Se está trabajando de forma seria y rigurosa, y lo he podido ver. Y estas jornadas son un ejemplo del aporte científico indispensable a la candidatura. En este sentido, se está trabajando bien y de forma rigurosa. A partir de ahí, debe ser el Comité quien tendrá en cuenta si es merecido estar en la lista, con los informes que harán los órganos correspondientes.
¿Cuántos componen esa lista en España?
Son 44. España es el tercer país del mundo de bienes. Y eso es un orgullo y una satisfacción, y un trabajo enorme. Pero también un hándicap tener tantos incluidos para los que se quieren incorporar. Pero también es mejor para las regiones que están menos representadas. En el caso de Canarias tenemos tres: La Laguna, el Teide y Garajonay. Y ahora en la lista indicativa está Rico Caído.
¿Y hay algún ejemplo de características similares a Risco Caído en el mundo?
Hay una iniciativa de importancia desde la Unesco para favorecer el campo de la arqueoastronomía, que es la unión de la arqueología y astronomía. Es un concepto muy poco representado en la lista de la Unesco, y puede favorecer al expediente.
El Cabildo ha aumentado los Espacios Sagrados de Montaña Gran Canaria con Tamadaba, en Agaete; Barranco Hondo, en Gáldar; Bentayga, en Tejeda; y Acusa, junto a Risco Caído, en Artenara. ¿Esa dimensión puede variar o es positivo ampliar el área de influencia?
Hay varios enclaves en torno al núcleo de Risco Caído. También hay una zona de 'amortiguamiento', en la que se está trabajando, para delimitar ese paisaje cultural representativo. Creo que es apropiado y representativo. Aparecen asociados a Risco Caído, que es el núcleo ceremonial sagrado, y los complementan. Está justificado en el expediente y en la candidatura.
¿Ese conjunto es indisoluble en la candidatura, o se puede llegar a acotar para favorecer su aprobación?
Entendemos que son los arqueólogos quienes deben describir cuál es la candidatura más apropiada. Nosotros podemos complementarlo más a nivel formal y de los tiempos. Nosotros no estamos sobre el terreno, ni conocemos sobre los aborígenes de Gran Canaria. Entendemos que debe ser algo representativo del fenómeno cultural que representa a la población.
¿Qué aspectos son los que más valora la Unesco a la hora de tomar la decisión final?
Hay unos conceptos esenciales en los expedientes. Es el valor universal excepcional, aunque su significado se lleva discutiendo 40 años. Es que merece ser conservado, transmitido no para un pueblo, sino para el conjunto de la Humanidad. Y también que sea algo excepcional para una cultura determinada. Estamos hablando de una isla, de una zona en una completa soledad rural. Es un desarrollo evolutivo, sin influjos de culturas cercanas. Es de valor universal, pero propio. Y luego la autenticidad, que debe ser evidenciado.
Se habla de un plazo de tres años para la posible designación. ¿Es un periodo razonable, si se consigue?
Me da pánico y respeto hablar de plazos, por la ilusión con la que se vive esto, porque es un reconocimiento importante. También es importante a nivel político. Sí puedo decir que la candidatura se decide en la reunión de Patrimonio Histórico, con el Ministerio, el Estado y las Comunidades Autónomas, que deciden las que se deciden las candidaturas al Consejo de Patrimonio Histórico.
¿Hay un número máximo?
Uno por país. El Consejo de Patrimonio Histórico decide la candidatura, según el desarrollo del expediente. Hay una lista indicativa, en el que también influye la concienciación social. Y se presenta la que está preparada.
¿Cuantos candidatos hay?
Es complicado, porque la lista indicativa española se va reformulando, y no sabría decir.
