Los futuros taxistas del municipio de San Bartolomé de Tirajana tendrán que superar un test psicotécnico para obtener la licencia. Al examen de cultura, historia y callejero de la ciudad se suma ahora esta prueba que pretende valorar el comportamiento que mostrará el conductor frente a vecinos y turistas. La nueva medida, que forma parte de la modificación de la normativa de Transporte Público de Viajeros que aprobó el pasado martes la corporación en el salón de plenos de Tunte, prohíbe también el uso de emisoras de radioaficionados en el vehículo.

Hasta ahora la normativa municipal exigía a los solicitantes de una licencia de taxi conocimientos básicos sobre la ubicación de hoteles, hospitales o lugares de interés turístico en el municipio. Además del estudio de la legislación sobre tráfico, seguridad vial y el catálogo de tarifas que se aplican en la localidad sureña. Sin embargo, con el fin de "preservar la calidad del servicio en el ámbito turístico" el ayuntamiento ha incluido una segunda prueba de carácter psicotécnica para la obtención de permiso municipal de conducir.

Asimismo, la normativa limita el uso de emisoras de radioaficionados y de la "instalación de cualquier aparato que sea susceptible de comprometer la calidad y la seguridad del servicio, tales como dispositivos de DVD y consolas de juego". A partir de ahora el empleo de estos artilugios requerirá autorización previa.

Estas nuevas modificaciones permitirán, además, que los vehículos adaptados para personas con movilidad reducida pasen de siete a ocho plazas.

Los nuevos permisos municipales autoriza a sus titulares a equipar con lunetas y ventanas de vidrio antisolar sus vehículos y revestir con pegatinas adhesivas sus puertas laterales traseras con unas dimensiones de hasta 60 por 35 centímetros. En la parte superior de las puertas delanteras el coche deberá llevar estampada la palabra "villa" junto al nombre de San Bartolomé de Tirajana y el escudo oficial del municipio.

En cuanto a la sustitución de vehículos la ordenanza advierte de que dicha renovación deberá realizarse con unidades con menos de cinco años de antigüedad desde su primera matriculación, sin importar el país de procedencia del nuevo coche.

A partir de ahora el permiso habilitará al conductor a prestar sus servicios hasta en un máximo de dos licencias, aunque no podrá superar un cómputo total de 40 horas semanales.