Encarna Pérez-Herrero Rodríguez , natural de Valencia y con una larga e intensa relación con el municipio desde hace años, será la pregonera de las Fiestas de La Aldea 2016.

Pérez-Herrero habla con auténtica pasión del municipio con el que mantiene una larga e intensa relación desde hace años. No tiene reparo en afirmar que “no entiendo andar por la vida sin mi gente de La Aldea” y que “La Aldea para mí ha sido como revivir” porque “me han dado momentos, salud, amistad, alegría, vida”.

Nacida en Valencia el 15 de febrero de 1971, pasó los primeros siete años de su vida en Palma de Mallorca. Es licenciada en Ciencia y Tecnología de los Alimentos e Ingeniero Técnico Agrícola. En la actualidad trabaja en la Consejería de Agricultura del Gobierno valenciano en temas relacionados con el cultivo de la vid. Es madre de dos hijas, de 20 y 22 años.

Su relación con La Aldea de San Nicolás comenzó hace unos once años, siendo concejal de Cultura y Juventud del Ayuntamiento de Albalat dels Sorells en Valencia. “Yo llegué con muchas ganas de hacer cosas nuevas e innovadoras con los jóvenes”, recuerda, “y un día, el técnico me comenta que nos ha llegado un mail de un municipio de Gran Canaria para proponernos un intercambio juvenil”. El citado mensaje lo envió el concejal de Juventud en aquel momento en La Aldea, Orgiano Ojeda.

El intercambio se produjo finalmente pero “a tres bandas, Alcira, Albalat y La Aldea”. Y ocurrió “que conectamos desde el primer momento”, recuerda feliz Encarna. Tras la visita de los jóvenes aldeanos a tierras valencianas, viajaron de Albalat a Gran Canaria. “Yo no pude acompañarlos pero me llamaban y me insistían en que tenía que ir, porque los estaban tratando fenomenal y estaban encantados”. Y no lo dudó. “Un viernes cogí un tren hasta Barcelona y ahí un avión a Gran Canaria, un esfuerzo enorme para pasar únicamente 48 horas en La Aldea, pero mereció totalmente la pena”.

En este viaje “no sólo conocí el pueblo, sino su gente, con la que tuve una conexión total, esa que sólo tienes con los amigos de verdad, la familia, los hermanos, con esos amigos eternos” que te encuentras en la vida, señala Encarna.

A partir de ese viaje, se han sucedido otros. “He estado en bodas, bautizos, tenderetes”, señala “y a mi casa han venido muchos grupos individuales a conocer Albalat”.

Recuerda con emoción el momento en el que el alcalde, Tomás Pérez, le comunicó que la había propuesto como pregonera. “Estoy encantada”, explica Encarna, “y espero poder devolver de alguna manera todo lo que La Aldea me ha dado”.