La Guardia Civil ha conseguido "claros indicios de culpabilidad" contra el sospechoso de haber raptado hace nueve años al niño de Vecindario Yeremi Vargas y volverá a inspeccionar los lugares por los que se ha movido, según ha anunciado hoy el delegado del Gobierno, Enrique Hernández Bento.

El equipo que trabaja desde 2007 para aclarar la desaparición de Yeremi Vargas interrogó hace unas semanas como sospechoso del secuestro y homicidio del niño a Antonio Ojeda, un antiguo residente en Vecindario conocido como Juan el Rubio y que en la actualidad está preso preventivo, a la espera de ser juzgado por una agresión sexual cometida contra otro menor en el mismo municipio en el año 2012.

"Hay muchísimos indicios que apuntan a que esta persona es el presunto autor de la desaparición de Yéremi Vagas", manifestó Hernández Bento, quien ha subrayado que "es la primera vez que se sospecha de una persona con claros indicios de culpabilidad" en el caso del niño de Vecindario.

Prudencia

No obstante, el delegado del Gobierno pidió "prudencia y paciencia", porque existen unos trámites legales "que se deben cumplir" y a Antonio Ojeda todavía le asiste el derecho constitucional a la presunción del inocencia.

A partir de ahora, añadió, la Guardia Civil tiene previsto realizar "las actuaciones precisas para esclarecer los hechos, como una segunda inspección por los lugares donde se ha movido el sospechoso", bajo la supervisión del Juzgado de Instrucción número 2 de San Bartolomé de Tirajana (Gran Canaria), encargado del caso. Entre estas inspecciones está la supervisión de dos pozos próximos a la chabola donde Antonio Ojeda vivía, así como los alrededores de la infravivienda.

Cuando la instrucción avance, precisó Hernández Bento, Antonio Ojeda será trasladado de vuelta a Gran Canaria, desde el penal de Algeciras donde aguarda, en prisión preventiva, juicio por los abusos cometidos a otro niño. Juan El Rubio tiene un historial delictivo que incluye, además, malos tratos a una de sus parejas.