La ermita de San Pedro de la fábrica Destilerías Arehucas acogerá el próximo jueves a las 19.30 horas la presentación de la obra póstuma del poeta Fernando Ramírez, Piedras ceniza, un trabajo de la Tertulia P. Marcelino Quintana de Arucas que ha logrado hacer realidad captando fondos en una campaña de financiación por Internet.

Junto a la obra de Ramírez lucirá también la reedición de Obra Poética, cuando se cumplen 50 años de la antología Poesía Canaria Última, con la actualización durante este año del trabajo de autores como Juan Jiménez, Eugenio Padorno o Lázaro Santana.

Y de la que fue miembro el propio Ramírez, "con capítulo propio en la historia de la literatura canaria". A él además se le dedica la nueva web parafernando.es, en la que se está desarrollando un archivo digital sobre su figura y su obra.

A la presentación acudirán familiares de Fernando Ramírez y miembros de la citada tertulia, para recitar una selección de poemas contenidos en estas publicaciones que comenzarán en breve a distribuirse por diferentes bibliotecas y librerías del Archipiélago.

Algunos de estos textos son inéditos, "escritos entre la década de los sesenta y los primeros años ochenta. Pero Piedra ceniza, de regalo, da la oportunidad de conocer uno de los últimos proyectos de Fernando Ramírez: una breve mitología novelada sobre su ciudad natal con el título de Mapa búico de Arucas, una original propuesta inspirada, según explicó en su momento, de Agustín Espinosa, y que aparecía en una breve reseña de su obra Lancelot 28°-7º.

El del aruquense son cuatro fichas -volcán, cantera, vega y agua- que contienen imágenes y textos de escenas arquetípicas en las que, "fantasmas y miedos se van desvelando poco a poco en el desarrollo de varias narraciones, cabalgando entre la fantasía y la realidad, entre lo mítico, lo emblemático y lo esencial en las raíces geográficas de este lugar de Gran Canaria". Para los promotores de la publicación el citado mapa es probablemente "la mayor aportación de este proyecto editorial póstumo".

Ramírez siempre tuvo una estrecha vinculación con su ciudad natal, a la que menciona en numerosos textos, y lo hace desde muy temprano, cuando en el año 1962 se lleva la Flor de Oro de los Juegos Florales de la ciudad, con el poema Salmodia de la piedra.

Prólogo de Yeray Rodríguez

En la ermita se leerá también el prólogo del verseador y profesor de la ULPGC, José Yeray Rodríguez Quintana, quien considera que en Piedras ceniza se descubre que, "quizá la poesía no es más que tratar de convertir en ceniza la pesada piedra que todos arrastramos; ceniza con la que poder escribirnos y tratar de descifrarnos? Fascina sentir que estos textos de Fernando, con un lenguaje tan contemporáneo y sin embargo varias décadas encima, siguen tratando de responder las preguntas que se hizo una generación poética que, por suerte, no fue la última".