De los casi cuatro millones de turistas que recibe al año Gran Canaria, un 12% realiza deportes de aventura y actividades al aire libre durante su estancia en la Isla. Este nuevo segmento de la industria, sin embargo, aún carece de un marco legal que garantice la seguridad del visitante. Autoridades y empresarios celebraron ayer en el Centro Insular de Turismo de Playa del Inglés el primer seminario sobre Turismo Activo del Archipiélago. El Gobierno de Canarias anunció que prevé aprobar un decreto para regular este tipo de actividades a finales de año.
El turismo de deportes de aventura gana cuota de mercado en las Islas a un ritmo acelerado. En los últimos años las empresas dedicadas a este tipo de actividades se han multiplicado, pero "no todas ellas cumplen con la normativa" establecida ni ofrecen las "mismas garantías de seguridad" al cliente, según desveló José Luis Echevarría, presidente de la asociación Activa Canarias, que organizó ayer este primer encuentro formativo para empresarios de ocio turístico.
Además de un latente intrusismo en el sector, según explicó el gerente del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria, Juan Francisco Pérez, muchas de las incidencias que ocurren en las zonas turísticas de la Isla podrían haberse evitado si las empresas que organizan actividades en plena naturaleza hubieran informado debidamente sobre las "alertas meteorológicas o los cambios de clima" que experimenta Gran Canaria a través de su orografía.
El Gobierno canario ante las deficiencias que presenta el Turismo Activo trabaja en la elaboración de un decreto, que prevé aprobar a finales de año. El texto legislativo establecerá las titulaciones que deben poseer los profesionales de esta actividad así como los seguros que deben incluir las empresas.
