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Artenara

Visita sorpresa de la Unesco a Risco Caído para evaluar su clasificación

Los especialistas recorren el entorno del yacimiento sin previo aviso como parte del expediente para declararlo como posible Patrimonio de la Humanidad

Visita sorpresa de la Unesco a Risco Caído para evaluar su clasificación

Un grupo de especialistas de la Unesco, entre los que figura Michel Cotte, miembro de Icomos (Consejo Internacional de Monumentos y Sitios), ha realizado una visita sorpresa de al menos 48 horas al entorno del yacimiento de Risco Caído, Bien de Interés Cultural que está sujeto a un expediente para su posible declaración como Patrimonio de la Humanidad, como hito arqueoastronómico.

Una resolución que implica la evaluación no solo del propio lugar en sí sino también de su ámbito natural, cultura y espiritual, del que el interior de Gran Canaria dispone de un surtido elenco, como el complejo arqueológico de la Sierra de Bentayga, con la Cueva del Rey como símbolo del conjunto; el Santuario de Risco Chapín, ubicado en Artenara y que también atesora, al igual que Risco Caído, una serie de triángulos púbicos; y el asentamiento troglodita de la Mesa de Acusa, con su espectacular Cueva de las Estrellas, itinerario que supone en su conjunto un potente sistema para lograr la citada declaración, y que solo aparece en otras dos culturas insulares: la Atituiti Ruga, en la Polinesia Francesa y Canagua, en Puerto Rico.

Michel Cotte, además, ya es un habitual de la isla de Gran Canaria desde el inicio del expediente de declaración, participando en las numerosas conferencias organizadas por el Cabildo desde que abrió el proceso en el año 2013.

Cotte es experto en gestión del conocimiento sobre el patrimonio de la ingeniería civil y sobre la proyección del patrimonio tecnológico antiguo en el marco de la ciencia actual y, entre otros reconocimientos es Premio Roberval y Medalla Struve de la Academia de Ciencias de Rusia.

Pero en el ámbito científico no sólo se ha disparado la atención por Risco Caído.

De tal forma que aquellos que deseen inscribirse para poder visitar el cada vez más famoso yacimiento no lo podrán hacer hasta el próximo año, ya que en apenas dos días se cubrieron las plazas disponibles para la presente temporada.

En estos momentos existen 400 inscripciones, que se realizaron en mayo, según informa el alcalde de Artenara, Roberto García, quien añade que tras cubrirse la demanda se mantuvo dos días más, "pero tuvimos que cerrarla inmediatamente porque la lista de espera era bestial". La oficina de turismo de Artenara lleva los correos electrónicos de peticiones y desde la centralita del Ayuntamiento se atienden las llamadas.

Además, este año los técnicos del Cabildo han acortado el periodo de visitas. "El ritmo ha sido menor porque ellos han notado un deterioro en el yacimiento, y entre todos, empezando por el consejo insular de técnicos de Patrimonio, se ha decidido limitar las entradas, que se han reducido a 36 este año". También se ha restringido el volumen de los grupos, pasando de veinte a solo doce.

Antes los visitantes accedían a la cueva para ver el fenómeno de la luz que recorre los iconos de la bóveda, y ahora solo pueden pasar a la entrada del recinto. Se ha habilitado un piso de goma para que no se deterioren las cazoletas del suelo y solo pueden ir entrando en grupos pequeños hasta la entrada para ver el fenómeno con la luz solar, pero no se puede acceder dentro de la cueva.

Para disfrutar de la experiencia hay que llegar a Artenara a las 06.30 horas y hasta finales de junio solo se permite ir los sábados, de ahí que, según el alcalde, "hay mucha gente que se echa para atrás porque es temprano".

En 2017 se estrena la réplica

De ahí el volumen de la reserva. A partir de julio se abre jueves y sábados. También en agosto y septiembre. En septiembre se cierra el período de visitas porque ya no entra la luz en la cueva. Cuando acabe el solsticio de verano se finaliza la apertura al público.

La visita comienza con la cita en Artenara a las 06.30 para salir sobre las 06.45 en guagua hacia Risco Caído. "Tras 20 o 25 minutos se llega a la cueva sobre las 07.45 para ir colocando al público y que pueda ver el fenómeno desde que entren".

La lista para 2017 se abrirá sobre finales de abril o principio de mayo. Será unos quince días antes del comienzo de las visitas, como se hizo este año.

La demanda ha subido mucho últimamente. Este año se desbordó con respecto a años anteriores. "Fue un desborde total. Esto ocurrió a raíz de la visita institucional que se hizo a Risco Caído por parte del presidente del Cabildo. Fue un desborde bestial".

Antes, por el desconocimiento, no había esa saturación de demanda. "No se había hecho tanta publicidad. Pero ahora, al entrar en la lista indicativa de declaración de Patrimonio de la Humanidad, la gente está más interesada, le ha picado mas la curiosidad y esto ha sido una avalancha".

Cabildo y Ayuntamiento están muy coordinados en este aspecto. "La coordinación con Patrimonio del Cabildo es total. Además, para el año que viene tenemos la suerte de que con casi toda probabilidad se va a abrir el centro de interpretación y esto le va a quitar un volumen importante de visitas porque la reproducción de la cúpula es exacta".

El fenómeno de la luz que dura seis meses se puede ver en el centro de interpretación, dentro de la cúpula, en diez minutos. "El recorrido que dura seis meses podemos verlo en diez minutos en el centro. Eso llamará la atención de muchas personas", concluye.

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