Tras varios días de aperitivo para aclimatar a los isleños, que se han venido macerando con temperaturas de hasta 32,3 grados en el sur de la isla, como la registrada ayer, la Aemet espera para este miércoles una fuerte subida del hervor también en la misma isla, cuyo mapa ha pintado, salvo en el norte, del aviso naranja que implica valores de hasta 37 grados centígrados, lo que a su vez ha obligado al Gobierno de Canarias a activar su alerta.

Ahora mismo en los cielos del archipiélago, el anticiclón situado al norte y que trae refresco a bordo de los alisios, se está peleando literalmente con la entrada de aire muy cálido africano proveniente de un territorio continental que, ayer a las cinco de la tarde se calcinaba a 46 grados, como ocurría en la localidad marroquí de Dcheira El Jihadia. De ahí que no se descarta ni la llegada de calima ni las lluvias débiles por la humedad.

Ese tira y afloja motivó a la Agencia Estatal de Meteorología rebajar el nivel del aviso previsto inicialmente para Tenerife, que también era naranja pero que se queda, en principio, en amarillo para el día de hoy, algo de lo que no escapa Gran Canaria, con especial incidencia las cumbres, medianías y barrancos orientados al sur y sureste.

Ayer 'ganaba' en las cotas bajas del norte de Gran Canaria el aire marítimo, suavizando los valores en Las Palmas de Gran Canaria, con 23,9 grados en la estación meteorológica de Plaza de la Feria, pero no así en las partes altas de San Bartolomé, máxima del archipiélago ayer, con los ya citados 32,3 grados centígrados, donde precisamente por culpa de ese frente del norte impide circular el aire seco, que se va recalentando a medida que pasan las horas.

Y chubascos débiles

Agüimes y Valleseco, que quedaron 'empatados' con 29 grados, fueron las segundas localidades más cálidas de Gran Canaria, aunque por debajo de otra máxima de Tenerife, la marcada en su capital con casi 30 grados de temperatura.

También las rachas de viento adquirieron velocidades significativas en Las Palmas de Gran Canaria, con pasos puntuales de hasta 64 kilómetros por hora, similares a los de La Aldea de San Nicolás y el aeropuerto.

En las islas de Lanzarote y Fuerteventura, que hoy quedarán también bajo el aviso amarillo de la Agencia Estatal de Meteorología, por valores de hasta 34 grados, se vivió ayer una jornada más suave, con máximas de 29 y 28,6, respectivamente.

La alerta decretada por la Dirección General de Seguridad y Emergencia del Gobierno de Canarias rige a partir del mediodía de hoy, hora a la que se espera que comience el episodio de mayor calor, en un tramo temporal que durará hasta las seis de la tarde. Hay que subrayar que también la Aemet no descarta la aparición de nubes bajas e intervalos nubosos que pueden incluir chubascos débiles de forma ocasional.

La presencia de calima a mayor altitud completan un cuadro en que al parecer no queda nada por visitar. Y lo hace para quedarse, puesto que para la jornada de mañana jueves -e incluso para la del viernes-, se espera idéntica situación, salvo que se añade al aviso amarillo las islas occidentales de La Gomera, El Hierro y la vertiente occidental de La Palma.

La única ventana de frescor, en la que se espera que, de cumplirse estos pronósticos , se pueda calificar como la primera ola de calor en Canarias en el verano 2016, tendrá lugar el sábado, pero lo hará para coger fuga al alza el domingo.

Seguridad y Emergencia, y bajo el protocolo de la alerta por riesgo de altas temperaturas, recomienda a la población que "permanezca en los lugares protegidos del sol el mayor tiempo posible y en las estancias más frescas de la casa".

Además, sugiere la ingesta de "comidas ligeras y regulares, bebidas y alimentos ricos en agua y sales minerales, como las frutas y hortalizas, que ayuden a reponer las sales perdidas por el sudor", así como extremar el cuidado cuando se tenga que "entrar o salir de los lugares se producen cambios bruscos de temperatura que puedan afectarle".

Por último, entre otros consejos, advierte del gran peligro que supone dejar "a niños o a personas mayores en el interior de un vehículo cerrado", y no realizar "ejercicios físicos prolongados en las horas centrales del día, que es cuando hace más calor".