Cada año, al llegar estas fechas, los grancanarios nos preparamos para la gran romería que lleva a miles de personas hasta Teror, pero unos días antes de que llegue el 7 de septiembre son los animales quienes toman el protagonismo gracias a la Feria de Ganado que se celebra en la finca de Osorio. En esta edición, la cantidad de animales inscritos superó el medio millar. "Hay 549 animales, ha aumentado la participación del ganado mayor y también del menor", destacó durante la feria Armando Rodríguez, técnico del servicio de extensión agraria del Cabildo de Gran Canaria que participaba en la organización del evento.

Las bestias habían llegado acompañadas por sus ganaderos a la finca de Osorio desde primera hora de la mañana, antes de que se cumpliera el plazo para la inscripción de los animales en la competición. Poco a poco fueron distribuyéndose por los espacios de sombra del recinto, que con su nueva ubicación -es el segundo año consecutivo que se celebra en el Llano de la Fuente, lo que ha permitido ganar espacio de aparcamiento en la zona donde antes se realizaba la feria- ha mejorado la comodidad de los animales.

En la zona más cercana al espacio de competición se ubicaba el ganado bovino de raza autóctona y al otro lado del paseo arbolado descansaban las razas foráneas junto al ganado caprino, al ovino y al equino, además de algunos ejemplares de cochino canario que no entraban en competición. Los animales estrenaron un sistema de agarre que José Luis Báez, primer teniente de alcalde y concejal de Desarrollo Rural del Ayuntamiento de Teror, señaló como uno de los grandes avances de este año junto a la nueva pasarela que tantas quejas suscitó entre los colectivos ecologistas. "Tenemos todos los permisos para su construcción y era una mejora que demandaban los ganaderos", aseguró el edil.

Demostraciones y competición

La feria de ganado sirvió para que muchos niños se acercaran por primera vez a los animales de granja -quizás por una cuestión de tamaño, los que más les atraían eran las terneras y los corderos- y para descubrir cómo servían para realizar los oficios del campo. Hubo demostraciones de trasquila, de ordeño, de arrastre y de trilla, momento que muchos pequeños aprovecharon para montarse sobre el trillo y dar una vuelta tirados por los bueyes.

Mientras todo esto ocurría, los veterinarios del certamen realizaban su discreta labor de análisis de las cabezas de ganado para valorarlos de cara a la competición. Suya iba a ser la decisión final sobre los galardones, por lo que su trabajo no resultaba fácil dado el elevado número de participantes.

Avanzada la mañana, y tras una actuación del grupo Los Granjeros de Montaña Cardones, llegó el momento de entregar los galardones a los animales más destacados de la feria. En esta ocasión se había aumentado tanto el número de premios -hasta seis en cada categoría- como la cuantía económica de los mismos. En total fueron repartidos más de 12.000 euros entre todos los ganadores. ¿El truco para conseguir las codiciadas cintas con las banderas de Canarias y de España que simbolizan los galardones? "Lo único que hay que hacer es tener buenos animales", explicó Conrado Marrero. Algo debía de saber, porque sus ovejas se alzaron con el primer, segundo y cuarto galardón de su categoría.

La entrega de premios también sirvió para hacer un sentido agradecimiento a la incansable labor de dos ganaderos veteranos que llevan más de 40 años dedicados a los trabajos del campo. El primero en recibir el homenaje fue José Ortega, que a pesar de su avanzada edad sigue yendo todos los días al alpendre a recoger la leche de los animales que ahora se encarga de cuidar su hijo Manuel. El segundo fue Manuel Ramírez, que no disimulaba su emoción por el reconocimiento otorgado: "Estoy muy contento", afirmó. Tras las ceremonias, el alcalde de Teror, Gonzalo Rosario, cerró el acto reclamando "que el sector primario siga siendo una potencia" en el municipio.