La Audiencia Provincial de Las Palmas ratifica la condena impuesta a David Delgado, ex concejal socialista de San Bartolomé de Tirajana, que ahora trabaja como personal laboral de la Concejalía de Juventud del Ayuntamiento de este municipio, por el Juzgado de lo Penal Número 1 que le acusó de cometer un delito desobediencia a la autoridad, tras no dar cumplimiento a una sentencia del Juzgado de lo Contencioso Administrativo de 2009, que le obligaba cuando era el responsable del departamento de Disciplina Urbanística a adoptar las medidas para que el nivel de ruidos que producían los locales de ocio nocturno de la plaza de Maspalomas se redujeran a "niveles tolerables". La Sección Segunda ratifica así la condena que le impuso el 11 de enero de 2016 el Juzgado de lo Penal Número 1 al ex edil, que ahora es empleado municipal, y le obliga a a pagar una multa de 8 euros por día durante seis meses, lo que supone abonar unos 3.800 euros, y también le inhabilita para mantener un empleo o cargo público durante nueve meses.
El ex concejal socialista no concurrió en las listas de esta formación en las pasadas elecciones, y su puesto lo ocupó su mujer Yolanda Jiménez. Delgado, a sabiendas de todo el proceso judicial que tenía pendiente a raíz de las denuncias presentadas por empresarios para que se cumpliera la normativa del ruido optó por dejar la política municipal y mantener su empleo como personal laboral de Juventud. Los hechos se produjeron durante el pacto que mantuvo Nueva Canarias con el PSOE, y durante el que Delgado se hizo cargo de Disciplina Urbanística, y la alcaldía la ostentaba María del Pino Torres.
El fallo de la Audiencia, resuelto el pasado 26 de septiembre de 2016,desestima el recurso de apelación presentado por el ex edil contra una sentencia del Juzgado de lo Penal Número 1 de Las Palmas de Gran Canaria que le condenó por este delito. La Audiencia Provincial, sin embargo, si que estima el recurso de apelación que presenta la ex alcaldesa de San Bartolomé de Tirajana, María del Pino Torres contra la misma sentencia del Juzgadode lo Penal que le impuso en su día la misma condena que a Delgado. Torres queda absuelta así de la desobediencia que se le imputaba por no hacer cumplir la sentencia que obligaba al Ayuntamiento a hacer que los los negocios ubicados en el entorno de la plaza de Maspalomas cumplieran la norma de ruidos.
Este proceso se inicia a raíz de las denuncias presentadas por el empresario Roland Christ, que regenta un establecimiento hotelero en Playa del Inglés, que decide recurrir a los juzgados al ver que los bares y discotecas cercanos superaban los niveles de ruido permitidos, lo que derivaba en quejas y denuncias de sus propios clientes, y tras trasladar las quejas al departamento de Disciplina Urbanística ve como el Ayuntamiento no daba cumplimento a la Ordenanza Municipal de Protección del Medio Ambiente frente a Ruidos y Vibraciones en Edificaciones de 2002.
La AudienciaProvincial considera probado que David Delgado, exedil de Disciplina Urbanística "mantuvo su voluntad" de no cumplir con lo que la norma de ruidos exigía , y con la sentencia dictada el 31 de julio de 2009, por el Juzgado de lo Contencioso Administrativo Número 6 , que le condenaba hasta el fin de su mandato electoral que concluía el 11 de junio de 2011. El citado fallo le exigía que en el plazo de dos meses "llevara a puro y debido efecto" el fallo judicial , que le obligaba a incoar "de inmediato el expediente correspondiente para que se aplicaran las medidas oportunas para los niveles de ruido de la Plaza de Maspalomas se reduzcan a unos niveles tolerables.
También recoge la Audiencia, que no acepta los hechos de la sentencia apelada, y los redacta de nuevo, como el Ayuntamiento fue notificado el 7 de octubre de 2009 de la resolución de la sentencia dictada por el Juzgado de lo Contencioso, y que después de ser notificado de oficio el 17 de febrero de 2010 por el mismo órgano judicial a fin de requerir al Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana a que justificase si ya había procedido a la ejecución de la citada resolución judicial. Es por esto, que el juez acusa a David Delgado de "desafiar el principio de autoridad del meritado juzgado a sabiendas de su ilicitud y de las consecuencias penales de su acción" .
En el recurso de apelación, la defensa de Delgado sostiene que si que incoó el expediente administrativo y que llevó a cabo actuaciones paa que se redujera el ruido en la zona de la Plaza de Masplomas, pero que dado el número de locales que allí se localizan era imposible conocer cuáles incumplían la normativa municipal. Este hecho lo tiene en cuenta el juez pero advierte que "no es lógico" que pasen meses sin que el Ayuntamiento adoptase medidas para hacer cumplir la sentencia.
La Sección Segunda de la Audiencia, sin embargo, considera que no se ha demostrado que la acusada, la ex alcaldesa María del Pino Torres tuviese conocimiento de la sentencia del Juzgado de lo Contencioso ni de los requerimientos que, en orden a su ejecución, remitó la citada autoridad judicial haciendo constar que tuvo conocimiento de la misma en julio de 2010, mediante una denuncia presentada en la alcaldía, tras lo cual pidió primero a Disciplina Urbanística que estudiase primero la reclamación, y se intentara solucionar ajustado a derecho, y después el 26 de agosto de 2010 ordenó al responsable de ese departamento que adoptase las medidas legalmente establecidas con celeridad y contundencia.
