"La calle", ese lugar donde acontecen a diario miles de historias humanas, efervescentes de sentimientos pero ocultas a veces a la mirada cotidiana, es fuente de inspiración para muchos jóvenes bailarines. Los movimientos del break dance, con sus piruetas, saltos y caídas libres al suelo permiten expresar "luchas personales" con estilo propio. La vigésimo primera edición del Festival Internacional de Danza Contemporánea de Canarias (Masdanza) arrancó ayer en la pista de patinaje de San Fernando con una ronda de batallas a la que se alistaron 48 participantes de toda España. La creatividad "fluirá" en Maspalomas hasta el próximo 4 de noviembre.

Aunque en su DNI figura como Álvaro Delgado (29), en medio mundo lo conocen como Alvarone. Comenzó a bailar de adolescente en las calles de su barrio, Torre del Mar, por pura "diversión" y a día de hoy se ha convertido en embajador de España en certámenes internacionales.

Tras proclamarse vencedor en batallas de danza callejera en Alemania, Finlandia y Nueva York, el joven dio el salto a China en 2014 de la mano de una compañía de baile. Allí en Macao-versión asiática de Las Vegas- hizo del break dance "más que una profesión, un estilo de vida".

"Simplemente me dejo llevar. El entorno, con sus inclemencias meteorológicas, su gente y sus ruidos, me da vida. Dejo interactuar mi cuerpo con el medio y el resultado son movimientos de pies" y manos en el suelo, explica el bailarín, que desprenden energía por doquier.

El Festival de Masdanza cuenta una vez más, y ya van cuatro, con la participación de Alvarone en su rondas de "filtros" de parejas de bailarines. Con dos trofeos de la muestra sureña en casa (2009 y 2015), el campeonato se muestra para el malagueño no solo como un reto, donde "cada año aumenta el nivel", sino como un fin de semana de relajación en la Isla.

"Llegué el viernes y regresaré a casa mañana porque me espera en breve una semana de trabajo en Francia. Siempre que vengo intento darme una escapada a la playa y disfrutar no solo del campeonato sino de los amigos que a lo largo del tiempo uno gana en este tipo de competiciones", asegura el bailarín en la pista de patinaje de San Fernando.

La competición de Maspalomas este año no solo ha ganado participantes de Barcelona, Madrid o Tenerife sino incluso aficionadas de la propia tierra.

Bgirl-Amazigh o María Pérez, para quienes la conozcan fuera de la pista de baile, celebró ayer una gran "fiesta de bautizo". Empezó solo hace dos años a "fluir" con los ritmos callejeros de la mano de Gabriel Hinestroza pero hasta ayer nunca se le había caído "la playera" en la pista de Maspalomas.

"No importa lo que ocurra, lo importante es sentir la música y convertir toda esa tensión que a veces llevamos dentro en ritmo, movimiento y naturalidad", confiesa la concursante, psicóloga de profesión y vecina de las Palmas de Gran Canaria.

En vez de con armas, las batallas de break dance se ganan con "creatividad". La idea central es que cada participante defienda su espacio vital a golpe de acrobacias "sin tocar" a su rival.

En esta "lucha" no hay "límites" ni censuras. Cada uno expresa con total "libertad" su forma de entender el mundo. De ahí que María haya elegido el apodo de Amazigh (pueblo libre, en bereber) para identificarse dentro de esta cultura urbana.

Una de las bondades que tiene este tipo de disciplina artística, según desvela María, es que crea "clanes" a su alrededor. Bailarines que se unen bajo un lenguaje común para compartir experiencias y valores. La "familia" que fundó María junto a Luci y Cristina tiene de apellido Tanekra crew. Tres mujeres que se conocieron en la calle y decidieron emprender un viaje juntas en torno a la pista de baile.

Este año el campeonato incorpora en su dinámica dos nuevas modalidades. A las batallas convencionales de parejas se suma ahora una ronda individual entre participantes de Canarias y Península y otra entre solo jóvenes del Archipiélago.

Según detalló la directora de Masdanza, Natalia Medina, esta iniciativa responde al afán de incrementar el atractivo de la muestra y motivar a muchos más jóvenes a que participen en el certamen.

Maspalomas destaca en la Isla por ser el municipio con mayor número de nacionalidades entre su población. Por antonomasia es un crisol de culturas, pero en muestras como las de Masdanza la riqueza racial se acentúa. Si a este ingrediente se le suma el ritmo caribeño, latinoamericano o africano de algunos de sus componentes, el resultado es un "espectáculo" único en las Islas.

Medina ha apostado por incrementar la presencia de jóvenes emprendedores vinculados a la cultura urbana este año en el campeonato con expositores de ropa de este estilo y actividades con música en directo alrededor de la piscina municipal de San Fernando de Maspalomas.