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Entrevista a Domingo Arias

"En Mogán me han tratado de intimidar pero yo nunca me he doblegado"

"En Telde pasé momentos delicados cuando la Guardia Civil me pidió documentos por el caso Faycan", confiesa el exsecretario del Ayuntamiento de Mogán

El secretario municipal, Domingo Arias, ayer tras culminar su etapa en el Ayuntamiento de Mogán. SANTI BLANCO

El pasado 25 de noviembre se despidió de la corporación de Mogán tras cuatro años al frente de la secretaría del ayuntamiento. ¿Por qué se marcha?

Me voy porque ha salido una plaza en el ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, en calidad de oficial mayor, que me parece una buena opción para mi carrera. Creo que al ser la capital una gran ciudad voy a aprender mucho y, además, me ofrece mejores expectativas laborales.

Antes de ejercer sus funciones públicas en Mogán también fue secretario en Telde, dos municipios ensombrecidos por supuestas tramas de corrupción. Parece que sus últimos dos destinos no han sido fáciles.

Cuando llegué a Mogán en 2012 el caso 'Góndola' ya había ocurrido, por lo que no tuve que realizar ninguna gestión vinculada a ese tema. Sin embargo, en Telde sí que pasé momentos duros, más bien delicados. La Guardia Civil y el juez me pidieron una serie de documentos que pretendían que entregara rápidamente. Pero claro, al igual que el juez y la Guardia Civil, el secretario municipal también realiza funciones públicas, por lo que les pedí tiempo para estudiar los expedientes y entregarles la documentación. En definitiva, creo que en Telde habrá siempre un antes y un después del caso 'Faycán' por la intervención que supuso en el ayuntamiento.

En los cuatro años de servicio en Mogán, ha trabajado tres años con el Partido Popular en el gobierno y año y medio con Ciuca-PSOE. ¿Con cuál se ha sentido más cómodo?

Con los dos. Yo no voy a los ayuntamientos a hacer amigos, sino a hacer mi trabajo. Si hay algo que no tolero y, de hecho, ahora mismo tengo pendiente una querella criminal en los tribunales por este asunto, es acceder a los intereses propios de un partido. En Mogán algún grupo político, durante su época de oposición, me ha tratado de intimidar para que no pusiera reparo alguno a sus pretensiones, sin embargo, yo nunca me he doblegado ante este tipo de cuestiones.

En 2013 Onalia Bueno, en aquel entonces concejala de la oposición, le denunció por haberle impedido realizar su función como representante del consistorio. ¿Ha mejorado la relación con ella ahora que es alcaldesa?

Aquel episodio se produjo porque al referirme en una comisión informativa a una jurisprudencia del Tribunal Supremo, luego Ciuca fue a mi despacho a pedirme dicha sentencia. Yo no accedí a dársela porque formaba parte del expediente y eso desencadenó un juicio de faltas que he tenido por esta causa. Desde entonces prácticamente no tenemos ningún tipo de relación, solo nos vemos en los plenos y en alguna que otra reunión. Cada uno trata de hacer su trabajo y ya está.

¿Aún cobra los 500 euros extras por productividad que se le concedió en 2013 por ejercer también las funciones de secretario de la empresa Mogán Gestión Municipal?

No, los dejé de cobrar hace año y medio. En aquel entonces la oposición puso el grito en el cielo porque decía que había que declarar la compatibilidad entre ambas funciones. Y, sin embargo, no había ningún tipo de inconveniente en que este cometido lo desempeñara el secretario, porque así lo prevé los estatutos. El hecho de ser secretario del ayuntamiento conlleva que seas también secretario de la empresa municipal.

Durante estos años, Nueva Canarias se ha quejado en repetidas ocasiones de errores que supuestamente ha cometido en la transcripción de actas, modificaciones propuestas por la oposición, el uso irregular de la vía de urgencia...¿qué tiene que decir al respecto?

La administración es un instrumento y lo que no podemos es ir contra ese mismo instrumento. La oposición lo que tiene que hacer es velar por que funcione bien y dejarse de cuestiones formales, que para eso ya estamos los expertos. El borrador de acta es aquel que levanta el secretario y ahí no tiene competencia ningún concejal. Lo que se aprueba son las modificaciones que finalmente la oposición quiere incorporar, pero no mi informe. ¡Solo faltaba que los concejales votaran también mi trabajo!

¿Qué consejo le daría a su sucesor en el cargo?

Mi sucesor en el ayuntamiento, por nombramiento accidental, va a ser un funcionario que se llama David Chao, que en otras ocasiones ya me ha sustituido. Le aconsejo que tenga paciencia y, aunque no soy de la teoría de la convicción, creo que es crucial valorar las cosas y ser responsables. Lo más importante es tener criterio y que en todo trámite quede el rastro, porque si hay algo proscrito en la administración es lo arbitrario.

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