Las lineas eléctricas de la futura central de energía de Chira-Soria quedarán soterradas en aquellas zonas que afecten a la flora, la fauna y el paisaje, mientras que las tuberías para impulsar el agua desde la desaladora de Santa Águeda hasta los presas de la cumbre tendrán que discurrir por el fondo del barranco de Arguineguín, no bajo la carretera.

Estos son algunos de los "avances" alcanzados ayer en la reunión entre el Cabildo de Gran Canaria y la empresa Red Eléctrica de España (REE), en la que también se acordó destinar entre tres y cuatro millones de euros a las obras necesarias en los dos embalses, según informó el presidente Antonio Morales, quien consideró que va a ser complicado que las obras comiencen este año 2017, aunque tampoco se descarta.

Morales encabezó la delegación del Cabildo, formada por los consejeros y técnicos de las áreas de Aguas, Medio Ambiente, Energía y Soberanía Alimentaria, mientras que por parte de Red Eléctrica asistió la directora nacional de Transporte, Eva Pagán.

Tras varias reuniones entre técnicos de ambas partes, los máximos dirigentes del Cabildo y de Red Eléctrica "remataron" ayer las primeras modificaciones en el proyecto de la central hidroeléctrica de Chira-Soria, que con una inversión de unos 300 millones de euros se convertirá en un gran almacén de energía eléctrica procedente del salto de agua entre ambas presas, recordó Morales.

Entre esos avances, el presidente citó la propuesta de ampliación de la desaladora de Santa Águeda, que se tiene que negociar todavía con el Ministerio de Fomento, para que aumente la producción de 5.000 a 7.000 metros cúbicos al día. Se pretende que esa desaladora, además de llevar el agua del mar a los embalses, pueda ser utilizada por el Consejo Insular de Aguas en caso de que sea necesario para el consumo urbano o agrícola.

Ambas partes también acordaron realizar obras de refuerzo y mantenimiento en las dos presas para adaptarlas a los nuevos servicios que van a prestar. Esos trabajos costarán entre tres y cuatro millones de euros y se podrán sufragar a través del canon que tiene que pagar la empresa por el uso de los embalses.

Impacto ambiental

Respecto a las lineas eléctricas, que el Cabildo ha pedido soterrar en aquellos lugares donde tiene un mayor impacto medioambiental, Morales dijo que se ha acordado enterrar los cables en los tramos en que hay pinares, flora endémica o peligro para la fauna protegida, aunque aún están por determinar.

"Estamos de acuerdo en que se soterre, e independientemente de los estudios de impacto medioambiental, si vemos algo que chirríe en el paisaje, Red Eléctrica está dispuesta a reconsiderar esa parte proyecto", apuntó.

Morales explicó que las tuberías para impulsar el agua hasta las presas no podrán ser enterradas bajo la carretera que conduce desde El Pajar hasta Barranquillo Andrés por la localidad de Cercados de Espino, sino que tendrán que discurrir por el cauce del barranco de Arguineguín. La Ley de Carreteras, recalcó, solo permite utilizar el subsuelo de las vías cuando no existan otras alternativas para transportar el agua.

En la reunión de ayer también se localizaron las mejores zonas para el tratamiento y la eliminación de los residuos que generan las obras y la propia actividad de la central hidroeólica. "La reunión con la máxima representante de la compañía ha sido productiva y seguimos avanzando", concluyó.