El anticiclón que afecta al Archipiélago canario elevó ayer las temperaturas máximas por encima de los 31 grados, cuando aún faltan dos semanas para que acabe el invierno, y a partir de hoy jueves se incrementa también la llegada de polvo en suspensión, lo que ha llevado a la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) a declarar el aviso amarillo en todas las islas, con la excepción de las mitades norte de Gran Canaria y Tenerife y las cumbres de La Palma. El Gobierno de Canarias ha declarado la prealerta por calima a partir del mediodía.

El polvo en suspensión y las altas temperaturas se mantendrán todo este fin de semana, lo que agrava la sequía en las presas de las cuencas del sur de Gran Canaria, que siguen en mínimos históricos por las escasas lluvias del mes de febrero. Las reservas acumuladas en los embalses del Cabildo han disminuido hasta los 2,39 millones de metros cúbicos, el 23% de su capacidad total. La presa de Soria, la más grande de la Isla, está prácticamente vacía, con 125.000 metros cúbicos, el 1%.

Un anticiclón que impide la llegada de aire frío y vientos procedentes del continente africano traerán temperaturas inusuales en esta época del año y grandes concentraciones de polvo en suspensión, con bruscas subidas de los termómetros. En Las Palmas de Gran Canaria se pasaron de los 20,2 grados del martes hasta los 27,5 de ayer.

Las estaciones de la Aemet registraron máximas de 31,6 grados en el aeropuerto Tenerife Sur, 31,3 en Arico, 30,9 en Telde, 30,8 en Valleseco, 30,6 en Agüimes y 30,2 en Arucas. La mínima de Gran Canaria durante la madrugada no bajó de los 11,5 grados. Para hoy se esperan temperaturas similares o en ligero ascenso.

La predicción para hoy jueves es de cielos poco nuboso o despejados y calima a partir del mediodía, principalmente en las vertientes este y sur de las islas, sin descartar que la visibilidad se pueda reducir localmente a valores de 1.000 a 2.000 metros. El viento será de componente este, girando a sureste durante la mañana, con intervalos de fuerte en las medianías y zonas altas. El polvo en suspensión afectará a todo el Archipiélago, aunque con mayor intensidad a Lanzarote, Fuerteventura y al sur de las demás islas.

Ese pronóstico se mantiene para el viernes, mientras que el sábado disminuirá la calima en la segunda mitad del día y se registrará un ligero descenso de las temperaturas, más acusado en las islas de mayor relieve. Viento de componente este; con predominio del sudeste con intervalos de fuerte en medianías y zonas altas en la segunda mitad del día. El domingo habrá cielos despejados con algún intervalo de nubes altas y probabilidad de calima.

Sequía en las presas

Este aumento inusual de los termómetros complica la situación hidráulica de Gran Canaria, pues la falta de precipitaciones durante este invierno mantiene a las presas de las cuencas del sur en niveles mínimos, los más bajos desde el año 2001. Las siete presas del Cabildo apenas recogieron agua en el pasado mes de febrero, según los datos ofrecidos por el Consejo Insular de Aguas de Gran Canaria.

Chira tiene actualmente un volumen de 945.000 metros cúbicos, el 17% de su capacidad, y en el último temporal del 10 de febrero solo aumentó sus reservas en 20.000 metros cúbicos. Ayagaures embalsa 41.250 metros cúbicos y en el último mes ha perdido más de 3.000 metros, por lo que se encuentra al 2% de su nivel máximo. Similar cantidad perdió La Gambuesa en el mes de febrero y se queda al 52% de su capacidad. También en las cuencas del sur de la isla, Fataga está al 4% y El Mulato al 60%. En el norte, La Candelaria no recibió agua en febrero y sigue al 23%, mientras que El Vaquero recogió 1.600 metros cúbicos y está al 62%.

Los embalses privados de la cuenca de La Aldea -Siberio, El Parralillo y Caidero de la Niña- acumulan unos tres millones de metros, el equivalente al ruego de una zafra del tomate. Ante estas carencias, el Cabildo está trasladando agua de riego agrícola desde las depuradoras de la capital al sur.