El arquitecto Faustino García Márquez, nuevo hijo predilecto de Gran Canaria, ha apelado este a la responsabilidad colectiva y la necesidad de conservar el territorio como única forma posible de garantizar el futuro, durante el acto de entrega de honores y distinciones del Cabildo.

García Márquez ha hablado en nombre de los otros dieciséis homenajeados, entre los que destacan los nombramientos del empresario Sebastián Grisaleña también como Hijo Predilecto de la isla y los del cantante Luis Morera y la crítica de arte Clara Muñoz (a título póstumo) como Hijos Adoptivos.

Sobre el territorio confluyen "muchos intereses, derechos, ideologías, costumbres y actitudes, muy difíciles de conciliar. No es una cuestión de cuatro iluminados ni de cuatro oscurecidos, sino de democracia, transparencia, tiempo y consenso", ha defendido García Márquez.

En su opinión, "la durabilidad comporta que el crecimiento tiene límites y que el territorio es un recurso que no va a incrementarse ni renovarse, porque parece que el volcán de El Hierro no está por la labor de duplicarnos la superficie de las islas".

Por lo tanto, ha enfatizado, hacerlo duradero significa no consumirlo y reutilizar cada vez más eficazmente el que ya utilizado

"Ya hemos usado demasiado: entre 1987 y 2002, en solo 15 años, esta isla aumentó un 22 % el suelo consumido durante los 500 años anteriores. Y no fue la más insaciable: La Gomera, Tenerife y Lanzarote aumentaron su superficie hormigonada o asfaltada en más de la mitad, Fuerteventura la multiplicó por 2,7".

Recientemente, la superficie urbana del archipiélago ha superado a la cultivada y "es para estar preocupados, muy preocupados".

"Tenemos una grave responsabilidad personal y colectiva si no somos capaces, finalmente, de construir un futuro común para nosotros, nuestro territorio, nuestro planeta", ha alertado García Márquez.

Considera que "no es tarea fácil, en este tiempo de culto a la individualidad, de soledad comunicada, de precariedad, incertidumbre y creciente desigualdad".

Por eso, cree que es aún mayor la responsabilidad de los dirigentes y de las instituciones, "porque necesitamos que no acepten su progresivo debilitamiento, que amplíen el espacio de lo público para ayudarnos a recuperar el bienestar y el futuro, para defender el interés y el patrimonio comunes".

Por su parte, el presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, ha destacado la labor de los premiados, que "son perseverantes y constantes en los compromisos contraídos; generosos, porque con frecuencia han dado más de lo que recibieron o se les reconoció; originales y creativos, porque no se limitaron a repetir o reproducir sino que han innovado y contribuido a la riqueza de esta isla".

Morales considera que parte de la solución a los problemas actuales de Gran Canaria pasa por afianzar "la soberanía" de la isla, para que los recursos energéticos, alimentarios o medioambientales se conviertan en una herramienta de cohesión y de garantía de sostenibilidad.

"Gran Canaria abre horizontes de progreso en la emprendeduría, en la investigación, en la educación, en la innovación, en el deporte, en el turismo, en la solidaridad, en el arte, en la moda, en las nuevas tecnologías", según Morales.

A su juicio, Gran Canaria es una isla atractiva para visitantes e inversores, las iniciativas emprendedoras se multiplican en número y originalidad y el turismo atraviesa un buen momento.

Igualmente, la producción local gracias al apoyo al sector primario, la pequeña y mediana empresa se consolida y la renovación energética está en marcha.

También "volvemos a ser referentes deportivos y la reciente candidatura de Risco Caído y las montañas sagradas de Gran Canaria a convertirse en Patrimonio de la Humanidad sella un tiempo de ilusión y regeneración".

Entre los distinguidos por el Cabildo de Gran Canaria también se encuentran el Colegio San Ignacio de Loyola, Pacuco Rosales, Germán López, la Heredad de Arucas y Obstetricia del Materno.