La tromba de agua que descargó ayer con virulencia en Fuerteventura registró hasta 50,8 litros por metro cuadrado en el municipio de Antigua, aunque Tuineje y, especialmente, el pueblo de Tarajalejo también sufrió las consecuencias de las fuertes precipitaciones. No solo se tuvo que cortar la carretera FV2 que une Puerto del Rosario con Morro Jable, a la altura de Tarajalejo, por varios desprendimientos de tierra y lodo que alcanzó la calzada, sino que los efectos del agua ha provocado que hoy se suspendan las clases en el colegio público de la citada localidad.
Agua, granizo, frío, truenos y relámpagos. La segunda jornada del temporal que azota desde el pasado fin de semana a Fuerteventura dejó la tierra empapada porque una gran parte de los barrancos corriendo con intensidad logrando no solo llenar las sedientas gavias sino las presas secas. Un agua que ya había sido bendecida por los hombre del campo el sábado, pero que ayer volvió a convertirse en protagonista de una forma violenta, no en vano cayo un gran porcentaje de litros en un corto espacio de tiempo.
Los operarios de carreteras del Cabildo majorero tuvieron trabajo extra pues tuvieron que reforzar el servicio ante las numerosas incidencias en la red viaria insular, concretamente a la altura de Tuineje, Giniginamar y Tarajalejo.
Evacuados
Un helicóptero del Grupo de Emergencia y Salvamento (GES) del Gobierno de Canarias evacuó a 21 senderistas que no podían cruzar el barranco de Ajuy, por la crecida de su caudal.
Vecinos de la urbanización Puerto Azul, cuyas vivienda quedaron anegadas y sin luz, denunciaron que el Ayuntamiento de Tuineje retirase a los efectivos del servicio de emergencias cuando "estábamos aislados, sin luz eléctrica y nuestras casas inundadas".
