El Cabildo de Gran Canaria mantiene la carretera de acceso a la zona de acampada de los Llanos de la Mimbre y el área recreativa de Tamadaba cerrada por el reasfaltado de un tramo de 800 metros que ha provocado la polémica en algunos sectores ecologistas. La controversia llega por la tala de dos pinos próximos al camino en el que se realizan las labores de mantenimiento de la calzada. Los operarios de Medio Ambiente del Cabildo de Gran Canaria realizaron el corte de los árboles en cuestión por razones de seguridad vial, según un comunicado del Cabildo. La agrupación Ben Magec-Ecologistas reprochan la actuación y no quieren que el número de visitantes del parque aumente.

La disputa surgió a raíz de varios mensajes que circulaban por las redes en las que se denunciaba que el parque natural estaba siendo "violado con cemento, alquitrán y cortando varios pinos de más de 200 años". Ante el debate, el Cabildo decidió emitir una nota explicando el proceso que se lleva a cabo en el espacio protegido. "No se está realizando ninguna obra nueva, puesto que la carretera de asfalto ya existía, pese a encontrarse en muy mal estado", reza el escrito, "la única novedad es el ensanche en un tramo de 200-300 metros para incluir un arcén por cuestiones de seguridad".

El alcalde de Artenara, Roberto García, cree que las críticas recibidas por parte de los colectivos ecologistas con desproporcionadas. "Son los mismos que piden recuperar los camping de Tamadaba y cuando habilitas los accesos se quejan", replicó García, que además pide que se reasfalte toda la carretera circular del parque. "Es una petición que llevamos haciendo desde el Ayuntamiento desde hace años", aseguró García. Las calzadas de acceso a las zonas de acampada del espacio natural llevan sin asfaltar más de 30 años. "La medida solo mitiga la situación actual" añadió. El alcalde pide que se realice el mantenimiento adecuado a toda la carretera GC-216 que da acceso al parque de Tamadaba. "Tenemos un espacio natural único que tenemos que habilitar para el disfrute de todos", sostuvo García.

"Lo que sí se puede debatir es el sistema de gestión del parque y el uso de sus zonas de acampada", comentó, "pero no se le puede denegar un acceso seguro a los visitantes". Precisamente por el estado de las carreteras de los camping el Cabildo rechazó la recuperación de alguno de ellos por la falta de seguridad. "Si tenemos que evacuar a alguien por la vía terrestre hace falta que tengamos el firme en buen estado", explicó García, que lamentó que algunos quieran hacer política de actuaciones necesarias.

Las obras de mantenimiento son acordes al Plan Rector de Uso y Gestión del Parque Natural de Tamadaba, principal herramienta de conservación y gestión del espacio y tiene el informe favorable del director del mismo. Como el Cabildo remarcó en el comunicado, en ningún caso se está asfaltando ningún camino, pista o sendero, sino reasfaltando una carretera preexistente, que se encontraba en muy mal estado y ponía en riesgo la seguridad de los usuarios. Las vías de entrada son muy comunes en casi todas las áreas recreativas, buena parte de ellas en espacios naturales protegidos.

Otra parte de las obras corresponde también a las canalizaciones para evitar que las lluvias erosionen y levanten el nuevo pavimento. "El asfalto que había antes era de buena calidad", detalló García, "y el agua se lo llevó por completo, por eso era necesario crear cunetas que además evitan el desgaste de las zonas próximas a la carretera". Asimismo, la nueva cuneta es de apenas 300 metros. "Sí, se cortaron dos pinos que entorpecían la cuneta y sus raíces ponían en riesgo el futuro estado de las mismas", desveló el alcalde, que además reiteró que ambos ejemplares tenían unos cincuenta años y habían sido plantados por Medio Ambiente en los años posteriores a 1950. "No se puede poner el grito en el cielo por dos árboles", aseguró García.

Igualmente, el alcalde achacó a quienes critican las actuaciones de mantenimiento. "No podemos tener un espacio natural de este calibre sin unos accesos en condiciones", lamentó. "Al igual que se habilitaron senderos hay que hacer lo propio con las carreteras del parque", añadió García, que espera que los críticos se apacigüen cuando vean el resultado final. "Entiendo que el cemento recién puesto impacte, pero cuando se integre con la flora en pocas semanas quedará bien", afirmó.

Los ecologistas juzgan

El grupo Ben Magec-Ecologistas formulo también un escrito en que cuestionaba las obras. "En primer lugar, carece del cartel de obra obligatorio. La información precisa no aparece en ninguna parte del recorrido", detalla el escrito. " Para hacer la modificación de esta vía preferente de peatones, con velocidad máxima de 20kilómetros por hora, según se aprecia en la señal situada a la entrada de la carretera, mediante su asfaltado e instalación de cunetas de hormigón, se han talado más de 20 pinos canarios (no 3 como el Consejero de Medio Ambiente ha afirmado), algunos de grandes dimensiones, tal vez centenarios, que pueden verse en el recorrido, y otros que ya han quedado sepultados bajo el cemento", replican los ecologistas.

Pero la agrupación va más allá. " Por otro lado detectamos cerca de la zona de acampada de los Llanos de La Mimbre, junto al lugar donde Política Territorial pretende instalar un mirador artificial, un área de pinar natural donde se han talado un gran número de pinos canarios de grandes dimensiones y cuyos troncos son visibles aún en el lugar" aseguran desde Ben Magec.

Los ecologistas se consideran que la capacidad de carga de estos espacios naturales protegidos debe regularse, y no ceñirse sólo al área recreativa, por lo que a la hora de hacer proyectos de mejora de accesos en carretera, deben tener en cuenta las consecuencias y afectaciones: "hablamos de masificación, de entrada libre de vehículos, de tala de árboles y de generar miradores artificiales donde no hacen falta", sentencia el escrito.