A la edad de 84 años murió el pasado miércoles en Miami (Florida) Victoria Suárez-Galbán Guerra, descendiente de canarios. Su óbito se ha registrado pocos días después de que, a través de su sobrina Laura, confirmara por escrito a sus allegados y al Cabildo de Gran Canaria la donación de tres cuadros de Antonio Padrón al museo del pintor norteño.

Las obras, identificadas como Paisaje canario, Nacimiento (belén) y Arlequines, parecen pertenecer a una de las primeras etapas del artista de estilo indigenista. Fueron regaladas por éste en los años 50 a la dama fallecida, y a Agnes, hermana de la misma, con las que tenía lazos de parentesco. El tío materno de ambas, Odón Máximo Guerra Guerra, había contraído matrimonio con Severa Padrón, hermana de Antonio.

Nacida en Nueva York en 1933, la finada era hija de la guiense Carmen Victoria Guerra Guerra y del cubano-canario Leandro Súarez Galbán. Nieta del sobresaliente hombre de negocios que vino al mundo en Guía en 1851, Luis Suárez Galbán. Éste alcanzaría la presidencia del Banco Nacional de Cuba, además de liderar la Cámara de Comercio, para acabar falleciendo en Nueva York en septiembre de 1917.

Victoria Suárez-Galbán frecuentaría la ciudad natal de sus ancestros en Gran Canaria durante muchos veranos, hasta avanzada edad.

Parte de su infancia transcurrió en La Habana (Cuba), donde asistiría al Colegio Merici. Posteriormente regresó a la ciudad neoyorquina para iniciar sus estudios universitarios en Mary Mountain Manhattan College. Luego cursó posgrado de Bibliotecología en la universidad de Columbia, especialidad que le abrió después las puertas del Metropolitan Museum y el Frik Museum, también de Nueva York, centros en los que ejerció durante decenas de años. Durante ese periodo y como representante del departamento de préstamos de ambos museos debió acompañar el traslado de unos cuadros de El Greco para una exposición en España.

Pese a su jubilación y cambiar su residencia a Florida, Victoria Suárez-Galbán Guerra continuó con su actividad bibliotecaria en algunas ocasiones, aceptando una propuesta de colaboración parcial con The Société of The Four Arts, una entidad cultural de Palm Beach, conocida y valorada tanto por su interesante jardín botánico como por su galería de arte.

Su muerte se ha producido esta semana en un hospital de Miami, donde había ingresado aquejada de una enfermedad que, sin embargo, no le impidió conservar su lucidez hasta el último instante y reafirmar su voluntad de hacer llegar al museo Antonio Padrón los tres cuadros que éste les había regalado en otro tiempo a ella y su hermana, en una de las visitas que le realizaron a su domicilio de Gáldar.