El pleno del Cabildo de Gran Canaria aprobó inicialmente este viernes, con 26 votos a favor y una abstención, la adaptación del Plan Insular de Ordenación (PIO) a las Directrices de Ordenación General y del Turismo, así como las modificaciones sustanciales provenientes de la estimación de alegaciones ciudadanas, un nuevo texto en el que ha trabajado la Institución insular que descarta el gas de su modelo energético.

El documento elevado este viernes a pleno recoge el 80 por ciento de las alegaciones presentadas por la ciudadanía al texto anterior y también incluye la adaptación a sentencias de años anteriores que han creado jurisprudencia.

Mayor superficie agropecuaria, 16 nuevas áreas de alta fragilidad, la quintuplicación de la superficie para cultivos marinos y la dotación de una mayor importancia a la periferia de los núcleos urbanos, entre las novedades incluidas en el texto.

El PIO saldrá ahora exposición pública hasta el mes de septiembre, un periodo en el que la ciudadanía podrá consultarlo y realizar las alegaciones que estime oportunas para, tras ello, volver a ser sometido al pleno para su aprobación definitiva.