La cala situada junto al hotel Sunwing, en Arguineguín, se volvió a abrir al público sobre las 13:30 horas de ayer tras confirmar los técnicos municipales la ausencia de vertido u olor a gasóleo. La pequeña playa se encontraba cerrada desde el pasado jueves 13 de julio cuando la Policía Local de Mogán observase durante sus rondas por la costa un vertido de gasóleo. Los agentes decidieron entonces cerrar la cala.

Técnicos del Ayuntamiento de Mogán estimaron la posibilidad del origen del vertido en una pérdida de combustible de algún barco que se encontraba repostando o alguna embarcación que pasaba por la zona y arrojó accidentalmente gasóleo al mar.

La cala se ha mantenido precintada durante todo el fin de semana como medida de precaución para bañistas. El vertido de gasóleo ha sido un hecho aislado que no ha afectado ni a la zona de Costa Alegre ni a la playa de Patalavaca y los usuarios podrán disfrutar de la cala y el resto de la costa del municipio de Mogán.