Fuerteventura registró ayer una espesa calima y altas temperaturas, que alcanzaron los 37 grados a las 14.00 horas en zonas del interior y en la capital majorera. Además, la masa de aire caliente elevó la sensación térmica y a mediodía el ambiente era prácticamente asfixiante en toda la Isla.
El polvo en suspensión, según la Aemet, alcanzó niveles de entre el 40 y el 70 por ciento en Fuerteventura y la mayor intensidad se registró en el interior y sudeste de la Isla. La visibilidad se vio reducida a 3.000 metros en Fuerteventura, y se prevé que este fenómeno se mantenga hoy. La alerta naranja en las islas orientales continuará hasta mañana.
Un fenómeno que ocasionó importantes retrasos en los vuelos interinsulares, especialmente con Gran Canaria, y los viajeros aseguraron a su llegada al Aeropuerto de El Matorral que el problema de la escasa visibilidad afectó a ambas islas, con esperas de una hora.
Una jornada calurosa de agosto que las familias combatieron con excursiones a las playas, y prácticamente toda la costa se llenó de usuarios y bañistas hasta bien entrada la tarde.
El equipo insular de Seguridad y Emergencias junto a Protección Civil pidieron a los vecinos que se desplazan a caletas y playas aisladas que tuvieran especial precaución para evitar accidentes en el mar y golpes de calor.
Los socorristas de la Playa de Los Pozos en Puerto del Rosario desplegaron una carpa con sombra y alertaron a los bañistas del peligro de la exposición prolongada al sol, y recomendaron a las familias llevara abundante líquido y agua para evitar la deshidratación de los niños y mayores. Así como utilizar sombrillas, ponerse bronceadores y reducir el ejercicio físico.
"La prevención es fundamental en Los Pozos porque las familias dejan a los niños solos porque es como un lago y se van a las terrazas, por eso hablamos con los padres para que los pequeños usen gorras porque no hay sombras, y no permanezcan demasiadas horas al sol o en el agua", explican los vigilantes. A su vez, en la zona de Playa Blanca indicaron a los bañistas las zonas de corrientes y limitaron la entrada mar adentro de surferos y nadadores. Lo mismo sucedió en las Grandes Playas de Corralejo (la Oliva) que recibieron una avalancha de usuarios en la orilla.
En la Playa de El Castillo (Antigua) el equipo de salvamento puso en marcha el sistema de bicicleta acuática. Un ciclomotor original, impulsado por una hélice que funciona con la fuerza generada por los pedales y se sostiene sobre dos flotadores. También ofrecen un posible agarre a un bañista en una situación de apuro, y permite al socorrista acceder al lugar.
Ante el fuerte calor los agentes de Caleta de Fuste aprovecharon para estrenar este nuevo vehículo y charlar con los bañistas sobre sus prestaciones en las tranquilas aguas de este litoral.
Por el Norte, el núcleo turístico de El Cotillo recibió un enorme volumen de autocaravanas y campistas repartidos por los conocidos lagos junto al faro de Tostón. Mientras que en la zona sur las playas de Costa Calma, Butihondo y Solana Matorral de Morro Jable registraron un llenó absoluto de turistas.
