La villa mariana de Teror está en plena celebración de la Subida de El Pino. Los peregrinos han tomado las carreteras que llevan al municipio norteño para su cita anual con la Virgen. Desde primera hora de la mañana los caminos asfaltados que llevan a Teror han sido cortadas en una dirección al tráfico por la seguridad de los vianadantes. Muchos de los peregrinos agradecieron que el tiempo acompañase, ya que el día nublado facilitó la subida y que las temperaturas se mantuviesen bajas.

El pueblo está engalonado y no se escatimó en medidas de seguridad. Muchos de los romeros se dieron cuenta de que el nivel de vigilancia era mayor al de las pasadas ediciones. La Guardia Civil custodiaba las entradas para evitar que algún vehículo circulase en dirección contraria.

Sobre las tres y media comenzó la romería con las carrozas de los diferentes municipios que no quisieron fallar a la patrona de la Isla. A lo largo de la tarde seguiran subiendo romeros y peregrinos y la carretera de Tamaraceite-Teror permanecerá cerrada en ambas direcciones a partir de las siete de la tarde. A medida que la noche gane terreno la villa mariana se transformará en una fiesta, ya que hasta última hora de la tarde seguiran subiendo romeros para festejar El Pino.