Las bodas son habituales en el Parador Nacional de Cruz de Tejeda. Pero el incendio que ha afectado a catorce habitaciones, la piscina y la zona de terrazas obligó a Borja Ramos y Jess Wallace a buscarse un nuevo emplazamiento para la bodad que iban a celebrar este fin de semana. "Es una pena porque nos gustaba muchísimo ese sitio", aseguró Ramos. La pareja lo tenía todo planeado desde hace meses y, en cuestión de unas horas, tuvieron que organizar una ceremonia nueva. "Queremos dar públicamente las gracias al director del Parador, Gonzalo Alejo, porque nos ha ayudado mucho", señaló.

Ramos tiene una conexión especial con Tejeda, tanto es así que decidió que su celebración tuviese lugar en el Parador. "Tengo familia de aquí", reveló el novio. Pero el virulento incendio puso en jaque los planes de boda. "No nos lo tomamos como un aviso o mala señal, todo lo contrario, nos ha dado más motivos para casarnos", aseguró. La pareja ha conseguido trasladar la celebración a un nuevo local, esta vez un hotel en el sur grancanario. "No queríamos cambiar la fecha, porque viene mucha gente de fuera que no puede perder el viaje", detalló.

El Parador estaba listo para recibir a los 121 invitados, pero los daños sufridos por el incendio ha provocado que eche el cierre temporalmente. Una vez organizada la nueva boda, Ramos temió por la vivienda familiar de Tejeda. "Espero que la casa esté bien, porque no hemos podido subir a comprobarlo", señaló. La pareja espera poder disfrutar de una boda sin más complicaciones. "Por suerte todo salió bien y ya tenemos todo amarrado", sentenció Ramos.

Los encargados del Parador esperan poder reabrir lo antes posible. "Nuestra ocupación promedio hasta final de mes estaba entorno al 60 por ciento", reveló Manuel García, responsable de comunicación. "Hemos procedido a cancelar las reservas hasta la semana que viene, en la medida en que todavía no hemos podido evaluar los daños", añadió García.

La intención del Parador es volver a la normalidad cuanto antes. "Nuestra intención es poner de nuevo el Parador en marcha lo antes posible, pero solo podremos estimar el tiempo que nos llevará cuando evaluemos los daños", explicó. García desveló que "el miércoles por la tarde desalojamos, en coordinación con Protección Civil, a los 29 huéspedes que teníamos alojados".

Los desplazados fueron realojados en el NH Imperial Playa. "Contactamos con ellos para una posible reubicación en un hotel cercano. Todo el equipo de Paradores se volcó primero en saber que la integridad de huéspedes y trabajadores no estaba comprometida" aseguró García. Ayer a mediodía, los huéspedes pudieron regresar al Parador a recoger sus pertenencias, ya que el miércoles tuvieron que ser evacuados a toda prisa. Tras 25 años cerrado y abandonado, el Parador reabrió el verano de 2006 tras una obra de ampliación, proyectada por Tourespaña y adjudicada por el Cabildo a OHL por 5,2 millones. Los trabajos se centraron en doblar su capacidad de 22 habitaciones a un total de 44, de las cuales catorce sufrieron daños.