El incendio forestal de la cumbre de Gran Canaria provocó la muerte de una vecina de San Mateo a las pocas horas de iniciarse el fuego el miércoles por la tarde y su cuerpo calcinado apareció ayer a unos 600 metros de su vivienda en los Llanos de Ana López. Aunque su identificación esté pendiente del análisis forense, todos los indicios apuntan a que se trata de Carin Brigitte Ostman, de nacionalidad sueca, que previsiblemente fue devorada por las llamas cuando intentaba poner a salvo a sus animales.
Tras un nuevo susto en la mañana de ayer, cuando un conato en Llanos de la Pez quemó 1,5 hectáreas de fuera del perímetro de 27 kilómetros que se había considerado estabilizado, los equipos de extinción confían en que a lo largo de la jornada de hoy se pueda dar por controlado el incendio, según informó el presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, tras la última reunión de coordinación entre todas las administraciones que intervienen en la lucha contra el fuego.
Clavijo anunció que el Gobierno regional aprobará el próximo lunes un decreto para conceder las primeras ayudas a los afectados y el presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, adelantó que también se está planteando la declaración de zona catastrófica.
El incendio se considera estabilizado y con tres sectores ya bajo control, los de Tejeda, Taidia y Aríñez, aunque siguen bajo una estrecha vigilancia, según explicó la consejera regional Nieves Lady Barreto. En los otros tres sectores, los de Llanos de la Pez, Cazadores y Cueva Grande, continuarán hoy las labores de enfriamiento del terreno. Desde ayer ya pueden actuar los medios aéreos y hoy habrá cinco helicópteros disponibles para lanzar agua sobre los rescondos de las zonas más peligrosas.
El último balance del Gobierno canario mantiene la cifra de cerca de 2.800 hectáreas de terreno quemado, pero aún no se han concretado los daños en viviendas, fincas e infraestructuras. En la tarde de ayer ya quedaron abiertas todas las carreteras, pero se solicita a la población que solo se suba a la cumbre en casos imprescindibles. Aparte de entorpecer a los equipos de extinción, es peligroso circular por las zonas quemadas.
El hallazgo de una víctima mortal a causa del fuego conmovió ayer a todos los implicados y se recibieron mensajes de apoyo a los afectados desde todas las instituciones, entre ellos el del presidente del Gobierno central, Mariano Rajoy.
El fallecimiento de una persona también provocó el único enfrentamiento público entre las administraciones, cuando el alcalde de San Mateo, Antonio Ortega, cuestionó "los formalismos" de la Guardia Civil en la búsqueda de la vecina desaparecida, pues aseguró que se perdieron 13 horas en trámites. A su lado, la delegada del Gobierno, Mercedes Roldós, dijo que no admite que se cuestione la labor de la Guardia Civil y recordó que su actuación en el Parador de Cruz de Tejeda probablemente salvó muchas vidas. Morales se sumó a Roldós y reprochó al alcalde que pusiera en duda la profesionalidad de los que han intervenido en el operativo.
