Agüimes se despidió ayer del sacerdote Juan Artiles Sánchez, natural del municipio, en una misa en la parroquia de San Sebastián. Casi un centenar de vecinos acudieron a rendir el último homenaje al que fuera vicario de la Diócesis durante 42 años. Tras la misa, Artiles fue trasladado y enterrado en el cementerio parroquial.

Artiles falleció el martes a la edad de 83 años. Ocupó la máxima responsabilidad jurídica y del tribunal eclesiástico de la diócesis de Canarias desde 1970. Durante su mandato, las islas se convirtieron en una de las diócesis más abiertas y destacadas en la anulación de matrimonios religiosos. También luchó por los intereses de la iglesia y medió entre los pleitos por las grandes herencias grancanarias.

Los vecinos y residentes de Agüimes le recuerdan como una persona "muy inteligente" que siempre luchó por los más desfavorecidos. Domingo Hernández destacó su esfuerzo por la Casa de Betania, cámara episcopal, y la cordura que siempre mantuvo durante su mandato como vicario. "Era alguien muy conocido en el municipio, hizo mucho por la fe cristiana aquí", aseguró Hernández a las puertas de la iglesia minutos antes de la misa fúnebre.

"Quería mucho a este pueblo", señaló Alejandro González. "Vivía en Las Palmas de Gran Canaria, pero siempre estuvo ligado a Agüimes", añadió. Muchos de los vecinos que acudieron a despedir al sacerdote recuerdan su "temple" para mediar en conflictos y su inteligencia emocional. "No se dejaba influenciar, sabía mantener la compostura y tomar las decisiones más difíciles", explicó González. También aseguran que siempre tenía puesto el ojo en los problemas mundiales. "Cuando ocurría una desgracia en alguna parte del mundo siempre le dedicaba unas palabras o buscaba conseguir donaciones para la causa", detalló Hernández.

Artiles fue nombrado vicario judicial en 1970, con el entonces obispo Infantes Florido, tras su paso por la parroquía de San Juan de Telde, donde fue nombrado hijo adoptivo. La alcaldesa de Telde, Carmen Hernández, recordó en un comunicado la importante labor pastoral y docente que Artiles desarrolló durante más de una década en el municipio. Como agradecimiento a su aportación, el Ayuntamiento de Telde denominó con su nombre una calle situada entre La Majadilla y el complejo deportivo y de ocio del Club de Campo el Cortijo y lo nombró hijo adoptivo de la ciudad.

El alcalde de Agüimes, Oscar Hernández, afirmó que fue "un referente" en el municipio. "Nos hemos quedado todos un poco huérfanos, porque pese a que su carrera eclesiástica la desarrollo en Las Palmas de Gran Canaria siempre se involucro en los temas religiosos de Agüimes", desveló. El alcalde quiso destacar que siempre fue fiel a su sacerdocio y a su pueblo.

Artiles nació en Agüimes en 1934, estudió la carrera eclesiástica en el Seminario de Las Palmas y se licenció en derecho canónico en la Universidad pontifica de Comillas de los jesuitas y después obtuvo el doctorado en derecho civil por la UNED. Fue ordenado sacerdote en 1958 y coadjuto de la parroquia de la Concepción-Tafira Alta ese mismo año. Fue vicario general de la diócesis (1979-2007), chantre de la iglesia Catedral de Canarias (1970-sept.), vicario capitular, gobernando la diócesis desde junio de 1978 a enero de 1979, vicario judicial y delegado para las causas de beatificación y canonización. Ejerció la docencia en el colegio San Gregorio (Telde), en el instituto Alonso Quesada, colegio Teresiano de Las Palmas de Gran Canaria, en la escuela de Enfermería del Hospital Insular, colegio Universitario de Medicina y en el Instituto Superior de Teología.