Tunte se convirtió ayer en la casa común de todo el municipio de San Bartolomé de Tirajana. Residentes de los barrios y pueblos que integran el territorio sureño compartieron una jornada de convivencia, la de la sexta edición del encuentro vecinal, en el Parque Merendero, a la que acudieron más de 600 participantes, de todas las edades, en guaguas y coches privados.

Allí les esperaban para que se inscribieran en las distintas actividades programadas para este encuentro de los vecinos, presidido por el alcalde, Marco Aurelio Pérez y acompañado por concejales de la corporación.

Pérez agradeció la presencia de los vecinos desplazados a Tunte y valoró de que estuvieran representados todos los núcleos de población del municipio y le puso el toque internacional al comentar que en San Bartolomé de Tirajana conviven personas de distintas nacionalidades, entre ellos Rusia, Venezuela, Mauritania, Marruecos, Ucrania o Sierra Leona, para completar un total de 117 países.

Después del saludo del alcalde, los vecinos se dirigieron a las carpas en las que se desarrollaban distintas actividades. Se dio comienzo a diversos talleres, como maquillaje, elaboración de pan, manualidades, creatividad social, repostería, entr otros, además de exhibiciones de bailes latinos, zumba, capoeira de Barro Vermelho, actividades de multiaventura y juegos de mesa y petanca para asistentes de todas las edades, hinchables para los más pequeños, que también dispusieron de una ludoteca para que sus padres pudieran disfrutar de algunas actividades exclusivas.

Pasado el mediodía se empezó la preparación para servir un almuerzo popular, en el que la La Asociación de Cocineros Mojo Picón y la Asociación de Barman colaboraron activamente en la elaboración de la comida, con la concejala Amanda Cárdenes atenta al desarrollo de todos los detalles, para que a los ciudadanos estuviesen bien atendidos.

La tarde acabó con humor, con las risas del humorista Maestro Florido, y luego con la música de Yet Garbey y Willy Flores, que animó a los presentes.