Las obras de rehabilitación y reforma del Parador Nacional de Tejeda comienzan hoy y concluirán dentro de ocho meses, por lo que la Secretaría de Estado de Turismo prevé que el establecimiento se reabrirá a mitad del mes de julio. El hotel está cerrado desde el pasado 20 de septiembre, cuando un voraz incendio forestal iniciado en Tejeda afectó a sus instalaciones.

El organismo Paradores Nacionales, dependiente del Ministerio de Turismo, señaló ayer que "se han agilizado los plazos al máximo para que el parador canario esté rehabilitado en ocho meses; el primer paso es la reparación de la cubierta y posteriormente se acometerán las obras en las habitaciones afectadas y el spa".

El alcalde de Tejeda, Francisco Perera, indicó ayer que Paradores Nacionales solicitó una licencia al Ayuntamiento "porque van a empezar por retirar parte de la cubierta, ya que buena parte de ella se vio dañada como consecuencia de la tela asfáltica que tenía de la impermeabilización. La tela asfáltica tiene un componente del petróleo y eso se dilata con los calores".

"Tenían que limpiar todos los alrededores para poder empezar por el deterioro de la tela asfáltica. Ese es el primer paso que van a dar. Van a intentar que para finales del mes de junio o principios de julio esté el parador abierto al público otra vez", agregó Perera.

La adjudicataria de la cubierta es la empresa local Marcial y Sito Construcciones SL y el plazo de ejecución de esta primera obra es de dos meses. "La adjudicación de la segunda fase se llevará a cabo mientras se repara la cubierta, por lo que se prevé que ambas actuaciones se completen en ocho meses en total", señala Paradores Nacionales.

La presidenta y consejera delegada de Paradores, Ángeles Alarcó, manifestó que "por su importancia para la red de Paradores, para la economía local y para Canarias, queremos que el Parador de Cruz de Tejeda vuelva a abrir lo antes posible".

El alcalde de Tejeda apuntó que "es verdad que estas obras iniciales son de pequeña cuantía, porque están preparando el proyecto de la parte principal. Eso tiene que salir a licitación. Se está saneando todo para evaluar con más exactitud los daños que tiene el edificio. Así y todo los técnicos y arquitectos están trabajando en la redacción de la restauración de los daños para evitar que al final surjan sorpresas".

El edificio tiene dos partes. La nueva no está protegida ni catalogada, pero la antigua sí. "El incendio afectó a los dos cuerpos del edificio. La parte nueva va por comunicación previa. Nosotros ya le hemos dado a ellos lo que antes se llamaba una licencia de obra menor y que ahora se denomina comunicación previa con la nueva Ley del Suelo. Eso ya está".

"En las obras para la parte catalogada y protegida sí tienen que mandar el proyecto porque necesita el informe de compatibilidad, pero no va a tener ningún problema porque simplemente es restaurar la parte dañada y hay que cumplir los trámites preceptivos", añadió el primer edil.

El hotel no se abrirá al público hasta que se concluyan las obras. "Hay una parte que se puede utilizar, pero a final deduzco que no se hará. Porque no puede ser que tú tengas habitaciones en una parte del edificio y que tengas a gente trabajando en otras. Sobre todo por temas de seguridad, por incomodidad, el servicio, los ruidos, el polvo, la tierra. Han tomado la decisión de cerrar el establecimiento para ejecutar los trabajos con tranquilidad y seguridad", concluyó.