Las lluvias y el viento que llegaron ayer con la borrasca Ana dejaron anoche a oscuras gran parte de Gran Canaria. Sobre las once de la noche un grupo de ciclo combinado de la central del barranco de Tirajana se desconectó. La falta de luz afectó a los municipios de Agüimes, Ingenio, Gáldar, Teror, Guía, Teror, San Bartolomé de Tirajana, Telde, Arucas, Santa Brígida, La Aldea, Mogán, Firgas, Valsequillo, Artenara, además de a numerosos barrios de Las Palmas de Gran Canaria.

El suministro eléctrico se restableció por completo a las 23:35, después de recuperarse de forma escalonada en las distintas zonas. Los técnicos de Red Eléctrica Española (REE) realizaron maniobras para recuperar el servicio lo antes posible en aquellos lugares que se quedaron a oscuras en plena noche.

A pocos días de finalizar uno de los otoños más secos que se recuerdan en Canarias, la lluvia hizo por fin acto de presencia hasta bien entrada la noche en todo el Archipiélago. La cola de la borrasca Atlántica Ana dejó precipitaciones de carácter moderado e intenso, pero, sobretodo de forma persistente durante horas. El agua regó de forma generalizada Lanzarote, Fuerteventura y la mayor parte de Gran Canaria. Un elemento que llegó acompañado de rachas fuertes de viento, que superaron los 70 kilómetros por hora en diversas zonas y causó pequeños incidentes en los aeropuertos de las islas más orientales.

Los fuertes vientos de Ana obligaron a desviar dos vuelos que tenían como destino el aeropuerto de Guacimeta. Sobre las seis de la tarde, un avión procedente de Londres se desvió hasta Gran Canaria. Al mismo tiempo, la compañía británica Jet2 tuvo que aterrizar en Fuerteventura en lugar de en la isla de los volcanes. Una vez allí, la ventolera complicó el descenso, por lo que los pilotos tuvieron que dar un segundo intento.

Desde AENA indicaron que estas pequeñas complicaciones fueron fruto del fuerte viento cruzado y la lluvia que hacía presencia en Guacimeta en esos instantes. La racha más intensa que se registró en el aeropuerto fue de 67 kilómetros por hora a las siete de la tarde.

A partir de las seis de la tarde la lluvia arreció de forma más o menos generalizada en Lanzarote. Las cantidades superaron los 10 litros en varias zonas al cierre de esta edición. Concretamente, se recogieron 13,6 litros en La Graciosa y otros 13 en Tías. Además, se superaron los 70 kilómetros por hora en pueblos como Tinajo y Tías.

En Gran Canaria, durante todo el día se paseó una maraña de nubes bajas y medias por el cielo. Incluso, en las horas centrales del día brilló el sol y se superaron los 25º en municipios como La Aldea, un tiempo que en algunos momentos invitaba a ponerse al solajero o darse un chapuzón. A medida que avanzó la tarde, los cielos comenzaron a cubrirse y aumentaron las rachas de viento.

En Las Palmas de Gran Canaria también hubo numerosos fallos en semáforos repartidos por toda la ciudad por la lluvia que se mantuvo de manera persistente durante varias horas. Algunos de los más destacables ocurrieron en las intersecciones de Fernando Guanarteme con Costa Rica, Escaleritas con Mariucha, Rafael Cabrera con Munguía, Bravo Murillo con Canalejas y en la avenida Pintor Felo Monzón. En el barrio de Las Torres, concretamente en la calle Junco, se derrumbó un árbol de raiz sobre la parte trasera de un coche. Un hecho provocado por la lluvia y el viento racheado.

Asimismo, se produjeron numerosas balsas de agua en varios puntos de la capital grancanaria. Destacan las pequeñas inundaciones en las vías del entorno del Hospital Insular. El agua obstaculizó el paso de numerosos vehículos. El cuerpo de la Policía Local mantuvo un operativo especial de vigilancia para cubrir todas las posibles incidencias. En la plaza de La Feria se recogieron al cerrar esta edición 13,5 litros. Mientras, en la zona de San Cristóbal fueron 12,7.

Los chubascos se produjeron de manera persistente durante varias horas en todo el norte de Gran Canaria. Una lluvia constante que no causó grandes incidentes en municipios como San Mateo, Gáldar, Teror o Moya. Más allá de pequeños problemas con el alumbrado público, principalmente.

Este agua llegó con vientos racheados que no provocaron grandes complicaciones en las carreteras de la zona de medianías y cumbres. Las mayores rachas de viento se produjeron a última hora del día. Pasadas las diez y media de la noche, se alcanzaron los 76 kilómetros por hora en La Aldea.

Hasta las once de la noche de ayer se superaron los 41 litros en Teror, los 35 en Valleseco, los 21,8 en Agaete, 17,8 en La Aldea, 15 en Tejeda. En cuanto a las rachas de viento, no fueron tan destacables en Gran Canaria, pues no se superaron los 60 kilómetros por hora en la jornada de ayer.

Para hoy se esperan posibles chubascos débiles, sobre todo por la mañana. Caerán con mayor probabilidad en el norte y cumbres. El viento será del norte fuerte con probables rachas de muy fuerte principalmente en vertientes este y oeste, así como en zonas altas.

El aviso amarillo por lluvias estuvo activo en Gran Canaria entre las cinco de la tarde de ayer y las tres de esta madrugada. Mientras, se lanzó la alarma por vientos de hasta 75 kilómetros por hora. El aviso por este fenómeno en zonas altas seguirá vigente hasta las seis de la tarde de hoy, al que se le unirá el del mal estado de la mar. Durante el miércoles también habrá avisos por mala mar y vientos en toda la provincia de Las Palmas.

En Fuerteventura la jornada de ayer transcurrió sin grandes incidentes. Las rachas de viento superaron los 70 kilómetros por hora en puntos como el aeropuerto o la localidad de Corralejo. En cuanto a la lluvia, se alcanzaron los 12 litros en el aeródromo de la Isla, además de otras zonas, principalmente en el norte majorero.

En Lanzarote y Fuerteventura los avisos amarillos de la AEMET por viento y lluvia estuvieron vigentes desde las cinco de la tarde y hasta la medianoche. Para hoy no se descartan chubascos débiles y ocasionales en ambas islas. El viento será fuerte de norte girando a nordeste por la tarde.

El paso de Ana por diferentes países europeos durante el fin de semana también produjo complicaciones en el tráfico aéreo del Archipiélago. Durante la jornada del domingo se cancelaron un total de 13 vuelos en el Aeropuerto de Gran Canaria, siete de ellos con destino en la Isla y otros seis que partían desde el aeródromo de Gando.

La mayoría de las travesías que se vieron afectadas en la jornada del domingo en la provincia de Las Palmas tenían como origen o destino Amsterdam, Londres y varias ciudades de Alemania; lugares donde Ana dejó fuertes vientos, nevadas y lluvias intensas.

Se trata de la primera borrasca atlántica a la que la AEMET ha decidido otorgarle un nombre de forma oficial. Desde ahora, la agencia de meteorología pondrá nombre a las grandes perturbaciones que afecten a Portugal, España y Francia con un orden alfabético. El próximo temporal será bautizado con el nombre de Bruno.